Una noche mexicana con olor a traición
Gabino Cué, un grito en la oscuridad
Antonio Quintero
Lo que dicta la historia a lo largo del tiempo en todos los rincones de la república mexicana los días 15 de septiembre es la celebración del Grito de Independencia, festejar un aniversario más de esa gesta heroica que ha convulsionado al país entero en una revolcada historia que durante este siglo se ha ido despedazando en miles de fragmentos. La tradición está desapareciendo porque las nuevas generaciones ya no se tragan, ya no digieren esa historia que un puñado de escritores e historiadores pagados por un sistema político fueron acomodando a los intereses de gobernantes que pertenecieron a un grupo partidista.
Se han escrito miles de historias, miles de libros, millones de citas que en su momento fueron ejemplares o que el escritor le inyectó gallardía, emoción, y fabulas aventureras a cada personaje que participó en esas fábulas hasta llegar copiosamente a las gestas revolucionarias, las clandestinas, o posiblemente las reales, desde luego que no podían faltar aquellas revolucionarias.
Hoy esa referencia se ha convertido en un costal extremas dudas, relatos que no coinciden con la realidad una historia que ha quedado obsoleta ante las enormes verdades que brotan en el diario acontecer del México de este siglo.
UNA HISTORIA NEGRA
Entonces qué pueden decir ahora las referencias de los nuevos libros de texto, de primaria, de secundaria y de la educación pública de nuestro país. ¿Cuáles serían los nuevos libros de la historia actual, de sus gobernantes corruptos, de sus gobernantes rateros, asesinos, crueles, feminicidas, misóginos, ejecutores, fraticidas etc.?
¿Esa verdad será expuesta en esos libros de la educación pública del país?, o ¿maquillarán la actuación de todos esos gobernantes corruptos que ha dado la denominada patria?
La historia que dice y señala que gracias a todos los héroes mexicanos tenemos patria, una patria generosa, bondadosa, y llena de grandes virtudes, de grandes elocuencias.
Pero contrasta con el presente que se destaca en los diarios del México de ahora; señala la terrible atrocidad que viven millones de mexicanos por la violencia consumada por el crimen organizado, secuestros, asesinatos, y toda una red de corrupción incubada y generada desde las más altas esferas del gobierno, con resultados catastróficos en todas las entidades federativas.
Así entonces, dista mucho lo que verdaderamente inculca esa historia que ha sido miles de veces acomodada a los intereses de quienes enaltecen el doble discurso, el doble lenguaje de su mandato, una doble moral. No puede ser que se pretenda glorificar el pasado cuando el presente esta consumido por su podrida corrupción, por su mal gobierno, por todos los vicios que se resguardan desde el propio poder político y eclesiástico. Eclesiástico porque acordémonos de la participación del cura Miguel Hidalgo I Costilla, el famoso padre de la patria, un eslogan perfecto que ilustró la historia de la historia.
EPISODIOS DE GLORIA
Para ello es importante señalar un episodio más de ese histórico pasaje, que vale la pena volver a leer;
El veintinueve de noviembre de 1810, don Miguel Hidalgo y Costilla, expresa el bando que abolía la esclavitud y citó:
Siendo contra los clamores de la naturaleza el vender a los hombres quedan abolidas las leyes de la esclavitud.
Con esa medida Hidalgo dio un profundo sentido social al movimiento que había iniciado para hacer libre e independiente a nuestra patria, para hacer libres e independientes a los hijos de la nación mexicana.
A partir de entonces ya no habría esclavos, distinción de razas, ni tributos obligatorios; todos seríamos mexicanos con iguales derechos y obligaciones.
Más tarde Morelos quien continúa y amplía la lucha de Hidalgo escribía: Cansado el pueblo mexicano de sufrir el enorme peso de la dominación española levanta el grito de su libertad y emprendía valerosamente la obra de su regeneración.
Igualmente en los Sentimientos de la Nación, ese texto ejemplar que resumía el ideario del movimiento independentista, el cura Morelos señala con fuerza que la América era libre e independiente, que la soberanía emanaba del pueblo, que la ley debía acatarse sin excepción, y que debían respetarse todos los vórtices.
La gesta de Hidalgo y de Morelos no fue en vano, ellos encabezaron la lucha de un pueblo mexicano por ser una nación libre, independiente y soberana, una nación de leyes e instituciones, una nación democrática de ciudadanos.
Gracias a ellos tenemos Patria, tenemos identidad nacional.
La República Mexicana tuvo como base la Independencia, en ella encontró su guía, su sendero, su verdadero proyecto de nación.
Ahí encontró los principios de igualdad, de libertad y de justicia que requerían su tránsito desde entonces.
Sin lugar a dudas toda una gran escritura de grandes leyendas, de grandes historiadores, de grandes escritores, de aquellos que observaron o que fueron parte de las historias del México histórico, de ese México que buscaba algún destino, y que posiblemente no lo encontró. Por supuesto que ahora existen grandes emporios de documentales y enorme gama de archivos de las piezas del rompecabezas de esa historia, acomodada o no, cimentada en verdades o en mentiras pero que en nada se parecen a nuestra cotidiana realidad que nos ha convertido en seres esclavizados a una historia que posiblemente no nos pertenece.
LAS CONTRADICCIONES ACONTECEN EN OAXACA
Somos ajenos porque desde que Juárez y Díaz se convirtieron en honorables gobernadores de Oaxaca y luego en Presidentes de la República, Oaxaca se sumió en una profunda crisis existencial, pues los oaxaqueños han vivido desde entonces las peores dificultades y problemáticas sociales sin que poder alguno pueda dar respuesta y resultados, y Oaxaca es el peor –en todos los sectores-, de todos los estados, el que tiene los peores índices de pobreza y pobreza extrema, uno de los estados más saqueados, más vulnerados, pero no lo es todo es el estado con mayor analfabetismo, es la entidad que guarda una profunda ignorancia pero que recibe millones de recursos financieros para su educación, una educación pública que se ha estancado desde hace más de cuarenta años.
Entonces por qué en este siglo 21 la añeja historia todavía intenta reinventar, maquillar una historia que en nada se acerca a la realidad, a esa nuevo relato que están escribiendo los nuevos historiadores, nuevos escritores, porque la añeja se ha estado pulverizando ante una sociedad que ya no guarda respeto por sus valores y tradiciones, porque la clase política actual se ha encargado de ensuciarla por completo consus acciones corruptas.
Tenemos a una camada de gobernadores corruptos, desde los tiempos por lo menos de la “nueva vida política” de México, luego de la época revolucionaria desde las presidencias sexenales, con presidentes de la república que abusaron del poder, que tuvieron gobiernos ilegítimos, así se construyeron las nuevas historias que todavía incluso no se han dado a conocer de gobiernos autoritarios, de su inmensa riqueza, sus abusos y corrupción.
NUEVAS TRAGEDIAS
Esas nuevas generaciones de gobernantes no pudieron ocultar su historia, cargadas de lodo, pútridas, corruptas, durante su mandato amasaron grandes fortunas, hicieron de la corrupción su forma y hábito de vida. Para desgracia de todos los mexicanos que tienen patria todos esos gobernantes tuvieron la fortuna de permanecer en la impunidad, sin que nadie los llamara a cuentas, pues se cobijaron dentro de su partido político, pues la corrupción tocó a todos los partidos políticos en México.
Por ello, la impunidad sigue siendo el sello de la casa, llamada México, en esa patria que nos tocó ver, que nos vio nacer, en esa patria que nos ha cobijado, en esa patria que dicen algunos que escriben que tenemos derecho. Es una patria generosa en esa cruel impunidad.
En un reciente reporte “México: Anatomía de la Corrupción”, realizado y presentado por el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco) y el Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE). La impunidad se vive en todos los niveles de gobierno.
De 2000 a 2013, fueron exhibidos 71 casos de corrupción de 41 gobernadores, pero de éstos, sólo cuatro fueron castigados; los niveles actuales de corrupción e impunidad que enfrenta el país lo han afectado en su economía y nuevas inversiones, reveló dicho reporte
del Imco y el CIDE.
En el país, 41 gobernadores fueron acusados de corrupción, de 2000 a 2013, pero sólo 16 fueron investigados y apenas 4 castigados, lo que contrasta con Estados Unidos, donde en el mismo lapso acusaron a 9 gobernadores y todos fueron detenidos.
Las cifras de ambos países reflejan la incidencia de los funcionarios mexicanos por cometer estos actos y el nivel de impunidad.
Actos de corrupción e impunidad proliferan en México rezagando el crecimiento económico y la llegada de nuevas inversiones, además de generar costos en los ámbitos políticos y sociales,
EL GRITO DE CUÉ EN LA OSCURIDAD
En ese entorno pudimos observar que la historia no debe vacilar en la conducta simuladora, atrofiante de un gobernador como Gabino Cué en el célebre grito de Independencia, efectuado en su Palacio Rosa, apenas la semana pasada, donde en su arrebato –ya característico-, plasmó su gritó ¡por una educación de calidad!, luego de la lista de héroes que acostumbra el prólogo histórico para esa fecha, puede ser posible que en un marco de modernidad o de elocuencia Cué Monteagudo quiso intentar lo que siempre estuvo intentando y que lo plasmó en un grito desesperado, tener un gobierno que haya impulsado una educación con todos los méritos para ser una educación plena, concisa y de calidad, sin embargo la historia le reclama a Cué las grandes cifras de analfabetismo arrollador que registró durante su desgobierno, no pudo con los tentáculos de un sindicato de maestros que lo mantuvieron permanentemente de rodillas ante ellos, una sección 22 de la CNTE, que gobernó en su alternancia, una nueva generación de niños -más de un millón y medio-, el 30 por ciento que no tuvieron acceso a la educación, que fueron excluidos.
Esa es la educación de calidad que no tuvo empacho en gritar Gabino Cué fue un grito en la oscuridad, porque no pudo gobernar ni un segundo, un gobernante de la simulación, un gobernante que rendirá cuentas alegres, escondiendo hábilmente los millonarios recursos que desvió para otros menesteres personales… La historia de este personaje es tan oscura como el grito que realizó frente a un quiosco lleno de lonas instaladas por los maestros disidentes de la 22, acarreados para su festejo, para su noche mexicana con olor a traición porque simplemente traicionó la voluntad del pueblo, de sus organizaciones, de su sociedad, de toda la entidad oaxaqueña por completo… La historia lo calificara como un gobernador traidor… ¡Hasta la próxima!