Política Inconfesable: Ni tan malo eh!…


El presidente Andrés Manuel López Obrador

Rodrigo Villar

Los presagios de tormenta sobre el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, en su mayoría, han resultado en vaticinios inexactos que, eso sí, deben doler mucho a sus promotores. Desde esta tribuna me encuentro convencido de que este mundo globalizado, gobierno que no corre con suerte pues tiene la mitad de camino perdido.

Por añadidura, los perdedores y derrotados somos los ciudadanos, en su mayoría, porque estamos alejadísimos de las decisiones de aquellos que las toman. Somos herederos de una historia que ha observado un comportamiento errático de las personas que integran la gran masa social, no participamos, vivimos con atavismos que desconocen –desde antes de ejercerlos- nuestros propios derechos a intervenir como sujetos de esa historia, que además pensamos como vedada.

Comentábamos la semana pasada que la corriente descalificatoria del gobierno lópez-obradorista se vanagloria de “los errores” del gobierno federal, que se distingue por su intrínseca lucha contra el peor mal que se nutrido de la ignorancia y dejadez del pueblo: la corrupción.

De ésta como racimos de podredumbre se desprenden la impunidad, el robo, el asalto, la envidia, la violencia social y cuanto pecado, capital o no, usted pueda agregarle a la tragedia nacional.

Pemex

ESTABILIDAD, ANTE TODO

Aun así, con esos matices oscuros, el gobierno del presidente Andrés Manuel arrojó resultados que no se pueden desdeñar, pues en términos generales, la economía mexicana se encuentra estable, a pesar de la caída de la producción industrial y de que, aun cuando se han captado mayores recursos, todavía no se han alcanzado los objetivos planteados en la Ley de Ingresos de la Federación para este año, concluyó la Comisión de Vigilancia de la Auditoría Superior de la Federación (ASF).

La comisión aprobó ayer la opinión al informe del segundo trimestre de la situación económica, finanzas públicas y deuda pública, donde señaló que el manejo de la deuda pública ha sido responsable y estable, lo que contribuyó a reducirla 2 por ciento, respecto de diciembre de 2018.

En una reunión de la semana anterior, se aprobó sin discusión el documento, en el cual se resalta que en el segundo trimestre el PIB real no representó avances, respecto del primero y avanzó 0.3 por ciento, respecto del segundo trimestre de 2018.

Fantasma que amenaza en México

Al realizar el análisis por estado, la comisión indicó que la actividad económica de Sinaloa presentó el mayor crecimiento, 6.1 por ciento, mientras que el PIB de Tabasco retrocedió 10.9 por ciento.

La comisión refirió que, según el Informe sobre la situación económica, las finanzas públicas y la deuda pública del segundo trimestre, entre enero y junio los ingresos presupuestarios fueron menores 2.5 por ciento a lo previsto en la Ley de Ingresos, “influenciados especialmente por la caída en los ingresos de las empresas productivas del Estado (Petróleos Mexicanos y Comisión Federal de Electricidad) en 94 mil 222.7 millones de pesos”.

Para la comisión, ese comportamiento se explica por la aplicación a un ritmo menor de lo programado, del gasto público.

En el documento se resalta que, en la producción industrial, la minería y la construcción se contrajeron 5.8 por ciento y 6.2 por ciento, respectivamente, y que en contraste las manufacturas lograron un avance de 0.4 por ciento y el sector servicios de 0.2 por ciento.

Comisión Federal de Electricidad

No obstante, ponderó que “se ha logrado una transición hacia una economía menos centrada en la producción petrolera; esto se evidencia en el crecimiento de 8.6 por ciento de las exportaciones no petroleras, dentro de las que sobresale el sector agropecuario que ha crecido, en lo que va del año, 30.7 por ciento”.

También indicó que, si bien se han captado más recursos que 2018, no al nivel que previó la Ley de Ingresos, debido principalmente a la desaceleración de la demanda interna, la volatilidad del mercado petrolero internacional y la caída en la producción nacional de crudo.

Así que no es tan malo, como lo quieren ver los adversarios del gobierno que encabeza el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador. Se requiere madurez y paciencia para darle oportunidad a esta administración que heredó una rampante descomposición nacional, producto de la mediocridad de los gobiernos del PRI y del PAN.