Política Inconfesable: Güerito… y racista


Jorge Castañeda y Ricardo Anaya

Rodrigo Villar

Ricardo Anaya Cortés, el candidato de la rimbombante coalición  llamada Por México al Frente que integran la izquierda orgánica, (representada por los despojos y la inclinación de venderse al mejor postor del PRD), la derecha con el PAN por lo menos fiel a su designio político, y un remedo que se llama Movimiento Ciudadano cuyo propietario es el ex gobernador interino de Veracruz, Dante Delgado Ranauro, nos sorprendió –y a estas alturas ya nada nos debería sorprender en este bendito país-, al confirmar lo que ya se venía filtrando en diferentes medios de comunicación:

¡Nada más y nada menos que la incorporación del impresentable Jorge Castañeda Gutman!, al alicaído equipo de campaña de esa coalición, que a muchos les parecía un engendro, pero con el paso de los días, sus integrantes, fieles detentadores del poder público y aprovechados mercaderes con el dinero de todos nosotros, que son coyotes de la misma loma. Se lo voy a decir directo y sin barroquismos: son los mismos delincuentes, pero con distinto antifaz y cachiporra.

José Antonio Meade y Andrés Manuel López Obrador

Así, la llegada del guerito –como le decía José López Portillo a Castañeda Gutman, cuando el padre de éste el auténtico canciller mexicano, Jorge Castañeda y Álvarez de la Rosa lo llevaba de acompañante-, al equipo de Ricardo Anaya ha llegado a significar para algunos, la inyección de frescura y talento en teoría política que elevará al horizonte la candidatura del queretano, que no logra reponerse del golpe –al que no ha respondido con pruebas que lo exoneren de su probable y evidente participación en actos de corrupción para enriquecerse, como hacen los delincuentes de cuello blanco, utilizando todos los artificios financieros para multiplicar su fortuna personal y familiar.

Y de otro lado, se considera que Castañeda Gutman, es una excelente noticia para los oponentes de Anaya, Andrés Manuel López Obrador, y José Antonio Meade, porque el nuevo coordinador estratégico, más que aportarle apoyos al candidato presidencial de la derecha, le generará más animadversión de los votantes.

Dante Delgado Ranauro

Porque hay algo que choca entre amplios sectores de la población y Jorge Castañeda Gutman: el racismo.

Este personaje, yo le adjetivé como impresentable, se hubiese sentido afortunado si su lugar de nacimiento hubiera sido Noruega, Dinamarca, Canadá o de menos Estados Unidos. Es hosco a lo mexicano, mucho más a la indiada (así con esos ojos nos mira y desprecia), no deja de tacharnos como una sociedad insalvable e irremediable. Seguro, en caso dado, si él tuviera que salvarse, lo veremos saltando del barco, como las ratas, para refugiarse en su catedra de la Universidad de Nueva York, en Manhattan.

Por cierto, permitiéndome un paréntesis la cátedra que tiene no es permanente, es de profesor invitado, y no se encuentra entre las más relevantes de esa universidad estadunidense.

Elba Esther Gordillo

Él se vende siempre como el gran intelectual, cuyo propósito es cambiar la vida de los mexicanos (pura demagógia barata porque nos mira del hombro para abajo, como personas de segundo o tercer grado), y no cabe duda que se sabe vender, porque en la mayoría de los casos, su participación en la vida pública es como en oleadas: participa en enlaces televisivos en vivo desde su estudio en Nueva York o para la radio, cuando sus amos, precisamente las televisoras lo requieren como perro de presa para lanzarse contra los personajes incómodos al sistema político-económico, o para que posicione ideas que aparentemente son suyas, pero en el fondo son dictados de los que le pagan sus altos honorarios en dólares.

La participación de Jorge Castañeda Gutman en la campaña de Ricardo Anaya, apenas comienza, hay que esperar a ver cualquier tipo de dislates, de desaguisados, de torpezas –producto de su enorme y paradójicamente abyecto ego-, emprendidos desde su trinchera contra los contrincantes de su nuevo y coyuntural patrón.

Habrá mucho de qué hablar sobre él durante las próximas semanas. Pero que no se olvide la decisión de Anaya para atraer un personaje de tal talente. De darle cancha. ¿Quién se lo impuso? Sin duda no es gratis que Castañeda, el ex empleado y ex entenado de Elba Esther Gordillo, y también aparente enemigo de Carlos Salinas de Gortari, esté ahora con el queretáno.