Recorte presupuestal afecta severamente a los pueblos indígenas.
CDI, SCT, SEMARNAT y SAGARPA, registran graves decrementos.
Rodrigo Villar
Los recortes planteados en el paquete económico 2017 a los Pueblos Indígenas y los aplicados en 2015 y 2016, constituyen un agravio para los sectores más pobres del país, y dejan además un sin fin de cuestionamientos al realizarse sin criterios transparentes, y al utilizar cifras de beneficiarios que no coinciden con las informaciones proporcionadas por las instituciones oficiales encargadas de proporcionar los datos de las personas, y los rangos de edad que deben cubrir los beneficiarios de los programas sociales destinados a estos sectores.
La población indígena de México enfrenta grandes obstáculos para ver garantizado el ejercicio pleno de sus derechos, lo que se traduce en una elevada desigualdad económica y social, crecientes brechas en los niveles de bienestar y su exclusión de los procesos políticos y democráticos ocurridos en el país.
RECONOCE DEUDA ESTADO; NO CUMPLE SUS PROMESAS
Desde las instituciones del Estado se ha reconocido una deuda histórica con los pueblos y comunidades indígenas, lo que ha implicado la construcción de un marco institucional orientado a la promoción de su desarrollo, por tanto, la reducción del presupuesto y los programas destinados a su atención representa un riesgo para el cumplimiento de los compromisos y metas de este Gobierno de garantizar los derechos de los pueblos y comunidades indígenas y elevar el bienestar de su población.
Al respecto la Comisión para el Diálogo con los Pueblos Indígenas de México de la Secretaria de Gobernación ha solicitado la necesidad de la revisión de la información pública relativa al ejercicio de las erogaciones para el desarrollo integral de los pueblos y comunidades indígenas en 2015 y 2016. Señala que como resultado de los ajustes preventivos que se han realizado al gasto público en ambos años, existe una tendencia a reducir sustancialmente los recursos destinados a la atención de esta población, caracterizada por presentar los mayores niveles de pobreza, exclusión y desigualdad en el país y al mismo tiempo, se establezca una revisión puntual de las Partidas asignadas a los Programas de atención a los Pueblos Indígenas.
En el caso de la Comisión para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI) , el proyecto de presupuesto para el próximo año, recorta a esta dependencia de 12 mil millones asignados inicialmente para este año a 5 mil millones para el año 2017, es decir le recortan 7 mil millones de pesos.
Algunas de las implicaciones de los ajustes al gasto han resultado en lo siguiente: En 2015: El presupuesto de los programas presupuestarios de la CDI se redujo en 2 mil 693 millones de pesos, lo que representó el 22.2 por ciento del presupuesto aprobado.
El Programa de Infraestructura Indígena, destinado a la atención exclusiva de localidades indígenas se redujo en 2 mil 284 millones, lo que representa 31 por ciento del total aprobado.
Las mayores reducciones del presupuesto indígena se presentaron en CDI, SCT, SEMARNAT y SAGARPA.
Para compensar el recorte en los programas referidos, los programas con los mayores incrementos fueron la Pensión para Adultos Mayores con 6 mil 957 millones, el Programa de Estancias Infantiles 2 mil 277.5 y el Programa de Empleo Temporal 890 millones.
Resalta que el presupuesto indígena del Programa de Estancias Infantiles creció más de 10 veces; inicialmente se habían presupuestado 228 millones de pesos.
En el análisis del Presupuesto Indígena para el año 2015, se documentó la falta de claridad acerca de los criterios y metodologías usadas por los programas presupuestarios para identificar a la población indígena y ejercer los recursos etiquetados.
Resalta el caso de la Pensión para Adulto Mayores. De acuerdo con los resultados de la Encuesta Intercensal, en 2015 en México hay 820 mil 470 indígenas de 65 años o más que hablan alguna lengua indígena y 97 mil 431 indígenas de 65 años o más que se auto-adscriben como indígenas. La suma de ambas poblaciones es de 917 mil 901 adultos mayores.
El monto que otorga la Pensión es de 580 pesos mensuales y 6 mil 960 anuales. Por tanto, suponiendo que todos los recursos etiquetados se destinaran a apoyos, con el presupuesto original se pudo atender a un millón 861 mil 800 indígenas (más del doble del máximo de indígenas de 65 y más años que hay en el país) y con el presupuesto modificado se pudieron atender dos millones 861 mil 353 indígenas (más de 3 veces el número de indígenas en ese rango de edad).
Las Reglas de Operación del Programa de Adultos Mayores establece que para el desarrollo de las diversas acciones asociadas con la planeación, operación, supervisión, seguimiento, atención ciudadana y evaluación externa del Programa, la SEDESOL podrá destinar recursos de hasta el 3.61 por ciento del presupuesto asignado al Programa.
Suponiendo que eso aplicara también al presupuesto indígena, con el presupuesto original menos gastos operativos se pudo atender a unmillón 794 mil 589 indígenas (casi el doble del máximo de indígenas de 65 y más años que hay en el país) y con el presupuesto modificado se pudieron atender a dos millones 758 mil 58 indígenas (sigue siendo más de 3 veces el número de indígenas en ese rango de edad).
CIFRAS QUE SON INCONGRUENTES
Algo similar ocurre con el Programa de Estancias Infantiles. De acuerdo con los resultados del programa (disponibles en Transparencia), en 2014 había 9 mil 504 estancias en todo el país y 290 mil175 beneficiarios atendidos, mientras que en 2015 aumentó a 9 mil 534 estancias y 303 mil 374 beneficiarios atendidos. Por tanto, resulta complicado entender cómo creció mil por ciento el presupuesto indígena en 2015 mientras que el número de estancias en el país creció 0.3 por ciento y el número de beneficiarias creció 4.5.
En 2016 las erogaciones para el desarrollo integral de los pueblos indígenas se han reducido en 8 mil 970 millones de pesos, lo que representa el 10.5 por ciento del presupuesto aprobado. El presupuesto de la CDI se ha reducido en 4 mil 30 millones de pesos, lo que equivale a 33.9 del presupuesto aprobado, y resalta el caso del Programa de Infraestructura Indígena, que se redujo en 4 mil 79 millones de pesos, lo que representa 53.7 del presupuesto aprobado.