Los dicharachos


Mario Moreno “Cantinflas” Ahí está el detalle
  • Sabiduría en dichos mexicanos; aplican en las actividades del día a día.
  • Todos en algún momento de nuestras vidas hemos utilizado más de uno.
  • Advertencias que contienen no siempre son atendidas; duras consecuencias.

Reportajes Metropolitanos

Carlos Ravelo Galindo, afirma:

Los de arriba, los de en medio y los de abajo, los tomamos muy en serio. Y más hoy cuando los dicharachos están de moda. No cabe duda que los que hablamos castellano, vaya español, o creemos hacerlo, utilizamos dentro de nuestro vocabulario cotidiano una enorme y variada cantidad de dichos populares. Generalmente los empleamos para referirnos a ciertas situaciones de la vida o inclusive para dar algún consejo o advertencia sobre algún tema. Al echar un vistazo a estos populares aseguramos que las ha utilizado alguno.

Me canso ganso en desfile de modas

Me canso, ganso.
Aunque la mona se vista de seda, mona se queda.
Después de la tormenta viene la calma.
Más vale malo conocido que bueno por conocer.
No hay plazo que no llegue ni deuda que no se pague.
Cada quien habla como le va en la feria.
Más vale pedir perdón que pedir permiso.
No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy.
El león cree que todos son de su condición.
Dios aprieta, pero no ahorca.
Mientras hay vida hay esperanza.
Primero son mis dientes y luego mis parientes.  

Aunque la mona se vista de seda…

No hay mal que por bien no venga.
Ojos que no ven, corazón que no siente.
Con dinero baila el perro.
A palabras necias, oídos sordos.
A quien madruga, Dios le ayuda.
A mal tiempo, buena cara.
Cría cuervos y te sacarán los ojos.
Un clavo saca a otro clavo.
Hemos dejado estos al final porque son los consejos de mayor verdad:
Una vez al día, es osadía.
Una vez a la semana es cosa sana.
Una vez al mes es de Marques.
Una vez al año no hace daño. Porque, claro es de ermitaño.

Después de la tormenta viene la calma

Nos enseñó en el Excélsior en los cuarenta del Siglo XX el maestro Víctor Velarde Goroztieta: Si es breve y bueno, dos veces bueno. Por eso, Ahí nos vemos. Mañana nos

LA PRÓXIMA PRIMAVERA

Carlos Ravelo Galindo, afirma:

Reiteramos que además de escritor, reportero, cosmonauta y mejor amigo Octavio García es fecundo en su ironía. Antes de abordar una de sus odas, queremos demostrarlo con su siguiente diálogo: “A mis amigos y amigas. Colegas y colegos: “Les he comentado que mis estudios y diagnóstico torales sobre mis burbujitas en el cerebro ser Seguro será la misma obscuridad de antes de que yo naciera. Abro el correo, escucho mensajes y noticias que van con mi edad.
Para los jóvenes son sobre los recién llegados y para mí, de los que se están yendo. Han ido desapareciendo familia, amigos, colegas, conocidos; o personajes famosos que no sabía que lo eran, hasta que vi su esquela. Me he convertido en un pequeño panteón que he ido construyendo en lo más profundo de mi ser.
La luz de mis sentidos fundidos con mi pensamiento. (Los árboles de mi jardín no han florecido; ¿Tendré que recordarles que ya es primavera?) Me siento como un árbol bajo el zenit tropical; Es una línea directa entre el sol y el inframundo. Escucho el silencio de mi entorno; Lo prefiero al ruido que muchos usan como excusa para no vivir su propia vida. Como Walt Whitman, diría en su Canto a mí mismo: “Me ha tocado en suerte, lo sé, lo mejor del tiempo y del espacio”.


Se me ha hecho costumbre vivir. Ya no busco mi tiempo perdido. Mis lecturas, ambiciones y proyectos son limitados pues, seguir vivo este día, será mi única victoria. ¿Y sobre la próxima primavera? ¿El Rosh Hashaná? ¿El verano? ¿Mi cumpleaños? ¡No importan! De lo que estoy seguro es que, hoy, viviré un sólo por hoy.” No que no.

LEGADO DE UN GENIO

Carlos Ravelo Galindo, afirma:

¿Enfrentamiento entre México y Estados Unidos o juegos discursivos? Pregunta el New York Times

Sólo faltó un comentario al “convenio favorable  para ambos países”. Que suplimos con un cuento:
La hormiguita embarazada  reclama al elefante: “No debemos. Tenemos  que casarnos”.
Es tanto como declararle a los vecinos la guerra.
Y qué tal si la ganamos.

Reflexión para madrugadores

Cierto lo que dice la poeta de Colima, Rusia Macgregor:
“Más saben cinco burros que preguntan. Que un genio que contesta”.
Pero México tuvo, tiene también, sus talentos. “Ahí está el detalle” diría este genio.

Cuando escuchamos a los, entre comillas, intelectuales, escritores y político,  hablar en público.

O en un intento fallido de  reflexionar ante sus “pares”, nos trae a la memoria a un mimo mexicano, conocido por todos como Mario Moreno “Cantinflas” y su labilidad, delicadeza, al configurar sus frases.
Las pedimos prestadas para presumirlas:
“A pesar de ser tan pollo, tengo más plumas que un gallo y ganas de hacer justicia y darle al pueblo lo que el pueblo necesita”
Esta es una muy breve semblanza de  Mario Fortino Alfonso Moreno Reyes.  Personaje  estrechamente relacionado con la cultura mexicana, y en general con toda la cultura latinoamericana
Mejor conocido como Cantinflas, nació en la ciudad de México el 12 de agosto de 1911, fue un productor y comediante del cine mexicano. Aún para muchos no ha muerto.
Mario Moreno tuvo una carrera sumamente exitosa, desde carpero –se inició en una carpa, en la colonia Guerrero–, que lo llevó hasta Hollywood.
El legado de Cantinflas que perdura hasta hoy en día, incluye la autoría de frases célebres, que si bien, pueden resultar bastante divertidas también invitan a reflexionar sobre la vida.

Primero mis dientes y luego mis parientes

“La primera obligación de todo ser humano es ser feliz, la segunda es hacer feliz a los demás.
“Yo amo, tú amas, él ama, nosotros amamos, ustedes aman, ellos aman. Ojalá no fuese conjugación sino realidad
“Algo malo debe tener el trabajo, o los ricos ya lo habrían acaparado
“No que no, chato 

“No estoy para que ustedes me digan, ni yo para decírselos
“Lo difícil lo hago de inmediato, en lo imposible me tardo un poco más.

“Es que a mí me gustan mucho los animales, ¿ah, sí? por eso usted me cayó muy bien
“Estamos en una era, en la que el hombre, científica y tecnológicamente es un gigante, pero que moralmente es un pigmeo

“Aquel que mete la pata, y reconoce su falta, da prueba de su valor, al reconocer su falta.
“Si se necesita un sacrificio, renuncio a mi parte y agarro la suya
“O actuamos como caballeros, o como lo que somos 

“Ahí está el detalle”
Ojalá, muchos intelectuales y otros que presumen serlo, las recuerden.  Pero lo  más importantes las apliquen  bien.
Antes que a ellos se las recuerden.

craveloygalindo@gmail.com