Agencia Mexicana de Noticias
El término veda significa prohibición y se aplica en rubros de la pesca, la caza y cuestiones electorales. La veda electoral es una serie de prohibiciones legales que se aplican cuando hay elecciones.
Ni partidos políticos, candidatos, medios de comunicación, ni nadie, pueden realizar proselitismo en favor o en contra de tal o cual partido o candidato.
¿Para qué la veda? Para que los ciudadanos en la intimidad puedan reflexionar por qué opciones políticas emitirán su suprema voluntad en las elecciones que habrá el 5 de junio en 13 entidades de la República Mexicana, después de haber sido envenenados con fétidas y lodosas campañas.
Así que todo está listo para que 37.3 millones de mexicanos salgan a sufragar por algún candidato o partido, de esos que protagonizaron durante más de dos meses nauseabundos escándalos de corrupción sin que el árbitro electoral de México le sacara la tarjeta roja y menos que la PGR los retirara de la contienda por presuntas conductas inmorales.
AUTORIDADES ELECTORALES SE HACEN DE LA VISTA GORDA
Pareciera que en muchos de los casos, la autoridad electoral y judicial se hacen de la vista gorda para dejar hacer y pasar con el fin de que partidos políticos cobijen con su manto a algunos pillos de poderosas familias de México, encargadas de ultrajar la dignidad de los de abajo.
El próximo domingo 5 de junio estarán en juego mil 365 cargos de representación popular. Los estados en los que se renovará autoridades son: Aguascalientes, Baja California, Chihuahua, Durango, Hidalgo, Oaxaca, Puebla, Quintana Roo, Sinaloa, Tamaulipas, Tlaxcala, Veracruz y Zacatecas, además de la Ciudad de México, donde se elegirán a 60 diputados de los 100 que redactarán la Constitución del estado número 32 del país.
Atrás habrán quedado diatribas, acusaciones temerarias de enriquecimiento ilícito, ganchos al hígado o la mandíbula y estrategias perversas instrumentadas por la partidocracia y una clase política que por desgracia no goza de la confianza de los mexicanos.
Por segunda vez, en México, se ensaya la llamada democracia en candidatos independientes, unos reales, otros encubiertos y en la mayoría de los casos mercenarios del poder, que cuando en los partidos políticos ya no consiguen sus cotos y cuotas de poder, se han disfrazado ahora de candidatos independientes.
El caso es seguir en el negocio de la industria de la política. El domingo ya veremos si los ciudadanos protagonizan una jornada electoral en la que impere la civilidad.
LO QUE ACONTECE EN EL LEJANO PERÚ
También en Perú hay veda electoral, pero para los medios de comunicación de allá, los de acá podemos decir lo que se nos hinche la gana.
En Perú, la hija del genocida Alberto Fujimori, Keiko Fujimori, busca la presidencia de la República para perpetuar la dictadura fujimorista, a menos que ocurra un milagro, que es muy raro que se dé en política, y que su opositor, Pedro Pablo Kuczynski, del partido Peruanos Por el Kambio -PPK-, lo impida.
Lo malo es que este cuate también tiene cola larga y corta que le pisen, y como usted puede ver, es un asunto que tienen que resolver los peruanos.
GALI FAYAD, UNA HISTORIA POBLANA
¿Si un individuo saca secretamente de su país su fortuna rumbo a los paraísos fiscales, sin pagar impuestos; si de la noche a la mañana se hace de muchas mulas sin haber recibido herencia alguna o pegarle al gordo de la lotería; y utilizando el poder político obtiene concesiones a granel para regentear antros de vicio, qué título recibe? ¿Acaso estamos ante mafiosos del poder, que se distinguen por la inmoralidad y la corrupción, pues son capaces de comprar un cargo de elección popular desde una regiduría, presidencia municipal, diputación federal, senaduría, gubernatura y hasta la silla presidencial?
Actualmente sale nauseabundo lodo en 12 estados de la República, en los que habrá elecciones el primer domingo de junio para gubernaturas, alcaldías y diputaciones, y una cosa nos queda muy clara, pareciera que la clase política de México está podrida por los cuatro costados, pues muy pocos se salvan de ser exhibidos ante los electores de corruptos, carentes de oficio político y sensibilidad humana.
UN ANTRERO Y SACADÓLARES
Es el caso del candidato panista al gobierno de Puebla, y títere del mafioso gobernador, Rafael Moreno Valle, José Antonio Gali Fayad, quien hoy está en el ojo del huracán político por haber sido señalado en el escándalo de Los Papeles de Panamá, como un auténtico sacadólares que no paga impuestos.
Sí, el mafiosillo Gali Fayad, que salió de la nada y que hizo su fortuna cuando fue funcionario del SAT, en Puebla, levantó un emporio de sociedades de antros, bares y restaurantes exclusivos en la capital poblana, así como dos negocios fachada en Panamá, que son administrados por sus hijos y prestanombres.
Este sujeto, que hoy busca más poder político para seguir haciendo más barbaridades, se hace pasar como un poderoso Rey Midas.
La semana pasada La Jornada y otros medios publicaron en sus principales que el presidente municipal con licencia de la capital poblana, regentea solamente en ese estado unos 16 prostíbulos, de los que según se tienen noticias, han desaparecido una docena de jóvenes mujeres, pero por miedo nadie dice nada.
El artículo de La Jornada titulado Impulsa Moreno Valle a antrero millonario para gobernar Puebla da cuenta de nombres de antros del vicio que Gali Fayad ha obtenido mediante millonarios sobornos a funcionarios públicos y utilizando su poder como presidente municipal de La Angelópolis, lo cual presume que estamos ante un gravísimo conflicto de intereses que nadie castiga porque entre la ponzoñosa partidocracia mexicana se practica aquella máxima de tapaos los unos a los otros, como ocurre en las mafias.
Ahí le va las joyitas de ese mafioso panista poblano: Bhura Bar, Sophia Bar, Ámbar, La Cotorrita, Costera 11:11, Pichilingue, Lips, El Candelabro: food and wine retro bar, Jeffrey Club, Shinto, Ban punta 14, San Miguelito Food Court, La Bandida, La Divina Comedia, Champañería la Palafoxiana y Frida Bar y Cocina.
En conjunto, estas “patrióticas” inversiones de ese zar del vicio suman muchísimos millones de pesos, más las empresas panameñas, más los millones y millones de dólares sacados secretamente hacia paraísos fiscales y más lo que se acumule la próxima semana.
Y entre la partidocracia veracruzana no se cantan malas rancheras en materia de mafias.