Sentencian a feminicida a 106 años de prisión


José Alfredo Camacho fue sentenciado a 106 años de prisión por el asesinato de su pareja Jaqueline Pérez Herrera. Foto FGJCDMX

Laura Gómez Flores / La Jornada

Ciudad de México. Un Tribunal de Enjuiciamiento sentenció a José Alfredo Camacho a 106 años y 8 meses de prisión, por su responsabilidad penal en los delitos de feminicidio cometido en contra de su pareja Jaqueline Pérez Herrera y feminicidio en grado de tentativa contra la madre de ella, Inés Herrera, ocurridos el 19 de julio del año pasado, en San Antonio Tecómitl, Milpa Alta.

En la audiencia, que se llevó a cabo en las salas orales del Reclusorio Oriente, lo condenó a cubrir pagos por reparación del daño, indemnización por muerte, gastos funerarios y daño moral.

Además le retiró sus derechos sucesorios y los beneficios sustitutivos de la pena, y le suspendió sus derechos políticos, y dejó a salvo los derechos de la víctima para que, en etapa de etapa de ejecución, haga valer lo concerniente al pago de la reparación del daño moral.

De acuerdo con la investigación de la Fiscalía General de Justicia, el hombre privó de la vida a Jaqueline, de 25 años, con un objeto punzocortante, con el que lesionó varias partes de su cuerpo, y trató de matar a la madre de ella para evitar lo denunciara.

La mujer, sin embargo, esquivó el ataque y solicitó ayuda a policías que transitaban por el lugar, que lo detuvieron y presentaron ante el agente del Ministerio Público.

El Tribunal de Enjuiciamiento lo sentenció a 70 años por el feminicidio de Jaqueline y a 36 años y ocho meses de cárcel, por el delito de feminicidio en grado de tentativa contra Inés.

La FGJ, por otra parte, inició una carpeta de investigación tras la agresión que sufrió una mujer en el rostro cuando caminaba por la calle Picos Iztacalco II, en Iztacalco, reportada por una notificación médico legal de un hospital público ubicado en Iztapalapa.

El Ministerio Público decretó medidas de protección en favor de la víctima, a quien se le exhortó a acudir al Centro de Apoyo Socio-Jurídico para determinar el grado de afectación que presenta; mientras, peritos elaboran el retrato hablado del presunto agresor.