Ruiz Healy Times : Urge programa nacional de conservación y aprovechamiento del agua: Expertos


Sequía extrema en Nuevo León
  • Alarmante falta de agua en Nuevo León; secos 27 de 51 municipios
  • Cerveceras y refresqueras deben optimizar consumo del vital líquido.
  • Alerta con la inflación en México, no debe ser superior al 10 %.

Eduardo Ruiz-Healy

Alarmante sequía en Monterrey

El presidente Andrés Manuel López Obrador se refirió ayer, durante su conferencia de prensa, a la falta de agua que la sequía ha causado en Nuevo León y, entre otras cosas, dijo: “Por ejemplo: las cerveceras y las refresqueras que, en el caso de Nuevo León, en estos días ya tomen la decisión de no consumir agua para cerveza, para refrescos y se destine toda el agua para uso doméstico, que nos ayuden en eso, es una petición”.

Y es que la sequía afecta a una gran cantidad de municipios del país, como lo escribí en este espacio el jueves pasado, en donde advertí que la falta causará “que se produzcan menos alimentos y se afecten muchos procesos industriales que usan agua, lo que se traducirá en más aumentos de precios”.

Germán Martínez Santoyo

Hasta el 30 de junio, de acuerdo con el Monitor de Sequía de la Conagua, 27 de los 51 municipios de Nuevo León estaban anormalmente secos, 14 padecían sequía moderada y nueve sequía severa. Sólo uno no sufría falta de agua. La situación que prevalecía entonces era menos grave que la que hubo hasta el 15 de mayo, cuando ocho municipios se encontraban en sequía extrema o excepcional, pero eso no significa que haya agua en abundancia en la mayor parte del estado.

Si bien la sugerencia del presidente suena bien, el adoptarla repercutirá sobre los precios de los refrescos y cervezas en los estados que son abastecidos por las fábricas que diversas empresas tienen en Nuevo León y cuyos productos deberán entonces ser transportados desde otros estados. ¿Cuánto costará entonces una botella de 600 ml de refresco que hoy se vende en 17 pesos en Monterrey? ¿Y una lata de 355 ml de cerveza que le cuesta 10.50 pesos al consumidor?

No sé si Andrés Manuel y sus asesores se hayan hecho estas y otras preguntas, entre ellas: ¿cuánto dinero perderán las cerveceras y refresqueras de Nuevo León si dejan de producir sus productos?; ¿pueden reconvertir sus líneas de producción para embotellar agua y en cuanto tiempo y a qué costo?; ¿deberán reducir su planta laboral?

Leche, carne y huevos. Incremento en precios

La mayoría de las personas ignoramos u olvidamos que la industria manufacturera consume agua a raudales. Por ejemplo, para producir medio kilo de papel se necesitan unos 11 300 litros y la fabricación de un coche requiere de casi 250 000 litros.

Hasta producir el agua embotellada y los refrescos requiere de mucha agua. Para elaborar un litro de agua embotellada se requieren 1.39 litros, para un litro de refresco 2.02 litros y para un litro de cerveza cuatro litros. Fabricar una botella de plástico desechable de agua o refresco implica utilizar 5.3 litros y una botella de vidrio para cerveza unos 1.8 litros.

El calentamiento global que los gobernantes del mundo han preferido ignorar, los de México incluidos, está causando estragos y sugerencias como la que hizo ayer AMLO tal vez sirvan de algo para sortear la emergencia actual, pero no contribuyen en nada para resolver el problema.

Lo que urge es un programa nacional de conservación y aprovechamiento del agua antes de que se agrave la situación que de por sí es crítica. En nuestro país hay expertos en la materia, entre ellos el actual director general de la CONAGUA, Germán Martínez Santoyo. Tal vez es hora de dejarlos actuar sin cortapisas, limitaciones presupuestales e intereses político-electorales.

 

CUIDADO CON LA INFLACIÓN;

NO DEBE SUPERAR EL 10%

 

En 1973 la inflación en nuestro país fue de 21.37%. Un año antes fue de 5.56%.

Ernesto Zedillo

Después de 15 años de mantenerse en menos de 10%, las políticas económicas que a partir de 1971 aplicó el gobierno de Luis Echeverría detonaron un aumento de precios. Entre estas políticas: la estatización de la economía, el aumento del gasto público y de la deuda externa, y el mantener un tipo de cambio fijo y un peso sobrevaluado.

Tuvieron que pasar 20 años para que, en 1993, la inflación por fin fuera nuevamente de un solo digito: 8.01%. En 1987, llegó a 159.17%, la más alta desde que empezó a medirse este dato por el INEGI, en 1969, y desde 1868, de acuerdo con cálculos realizados por diversos especialistas.

Desafortunadamente, la baja tasa inflacionaria solo duró un par de años ya que, en 1995, luego de ser 7.05% en 1994, se disparó a 51.97% después del famoso “error de diciembre de 94” que cometió Ernesto Zedillo.

La inflación de doble dígito se registró en 1996 (27.7%), 1997 (15.72%), 1998 (18.61%) y 1999 (12.32%).

Por fin, en 2000, nuevamente fue menor de 10.0% al disminuir a 8.96%.

Y, desde entonces, cada año se ha mantenido en un solo digito.

Hasta ahora, pese a que en junio llegó a 7.99%, ningún pronóstico para 2022 la ubica en 10.0% o más.

En junio, los economistas del sector privado que participaron en la encuesta del Banco de México estimaron que será de 7.45%, mientras que los participantes en la encuesta de Citibanamex calcularon que será de 7.6%.

El presidente Andrés Manuel López Obrador

Entre los diversos pronósticos destacan los de OCDE (6.9%), Bank of America (7.0%), BBVA (7.1%), Moody’s (7.3%), S&P (7.4%), Reuters (7.62%), Trading Economics (7.83%), Oxford Economics (8.0%), Banorte (8.1%), Invex (8.3%), Finamex (8.4%), y Scotiabank (8.9%),

Las tasas arriba anotadas se refieren al Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), que permite conocer cómo y hacia dónde van los precios, pero que para los consumidores dista de reflejar la realidad que viven día tras día, cuando padecen la disminución del poder adquisitivo de sus ingresos debido al acelerado aumento de los precios de los productos que más consumen, especialmente los de sus alimentos.

ESCASOS RESULTADOS ANTE

MEDIDAS GUBERNAMENTALES

En junio, por ejemplo, el aumento de los precios de los alimentos procesados, bebidas y tabaco fue de 11.84%, el de frutas y verduras de 14.39% y el de productos pecuarios (carnes, pescado, pollo, huevo, leche y productos lácteos) de 15.51%.

Banco de México

Hasta ahora no han servido de mucho los aumentos de la tasa de interés interbancaria decretados por el Banco de México para detener la inflación ni las medidas para paliar sus efectos adoptadas por el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.

En enero, el INPC anualizado fue de 7.07% y, salvo una muy pequeña disminución en abril, fue aumentando hasta llegar a 7.99% en junio. El 11 de agosto entrante, o antes si lo considera necesario, la junta de gobierno del banco central deberá incrementar la tasa en más de los 75 puntos base con que la aumentó el 23 de junio pasado.

Cuidado con que la inflación anualizada llegue o supere el 10.0% durante los meses venideros porque la historia demuestra que es muy alto el costo que una sociedad debe pagar para reducirla a niveles de un solo dígito.