Quintero en su Tinta: El Equinoccio de Gabino Su derrota, su tumba, su fracaso


Antonio Quintero

Este día domingo 5 de junio es una fecha clave, una fecha posiblemente histórica, histórica porque se le acabará su propia historia a un gobernador inmensamente mediocre que no pudo gobernar en seis míseros años, larguísimos seis años, un gobernador que jugó con la pobreza de millones de oaxaqueños, un gobernador con la  suficiente estupidez para pensar solo en una soberbia infinita, dentro de  un orgullo ladino, y en una ambición única a su perversión, fue el sello de su política sexenal. Dejándolo peor.

 

CUÉ MONTEAGUDO Y SU GOBIERNO DE CUENTO DE HADAS

Solo él disfrutó de su historia, convertida en cuento de fábulas y se transformó en el Pinocho del palacio de gobierno de Oaxaca, sus mentiras adornaron discursos, y también fueron escritas en sus boletines de prensa, a su jefatura de prensa la pervirtió de manera degradante, la humilló.

El cuento podría llamarse de mil maneras, pero hay uno que da al clavo en la administración gabinista. Alí Baba y sus cuarenta ladrones, en todas las dependencias hubo enorme saqueo de recursos públicos, desviados para otros fines ajenos y en otros casos para engordar dietas de asesores, operadores, y socios de la propia administración gabinista, como se ha ilustrado desde un principio en estas páginas de El Correo de Oaxaca y como ha quedado evidenciado ya en redes sociales.

José Antonio Estefan Garfias

JORNADA ELECTORAL DESMANTELA CORRUPCIÓN DE GABINO

Si se le puede denominar que para fortuna de los oaxaqueños con la jornada electoral pudo conocerse toda la cloaca del gobierno gabinista y del propio Gabino Cué Monteagudo, que a través de las redes sociales la población pudo saber y entender lo que escondía la figura de Gabino, el gobernador de Oaxaca.

Diarios de circulación nacional dieron semblanza y testigo de los escándalos de corrupción del gobierno gabinista, dependencias como la de salud, obras públicas, transporte, seguridad pública, turismo y desarrollo económico, Cao, el sistema DIF, Ieepo, Imo, Ieea, entre otras.

Los presupuestos históricos que aplaudieron diputados federales para Oaxaca, solo se observaron en espectaculares publicitarios, la pobreza no se tocó, no cambió en nada. Ese recurso nunca aterrizó en beneficio de la población oaxaqueña. Las demandas sociales permanecen aún porque hubo caso omiso de Gabino Cué.

Por supuesto que ahora en la jornada electoral salió a relucir que todos los recursos recibidos fueron ampliamente utilizados para la campaña electoral de Estefan Garfias, así como equipo del gobierno del estado como vehículos, helicópteros fue utilizado descaradamente por el candidato de la coalición CREO.

Los diversos audios de llamadas telefónicas atascaron las redes sociales de los operadores de Gabino Cué Monteagudo, que junto con el manifestaron en dicha reunión la creación de una red con fines electorales, llamada Red Oaxaca, utilizando mañosamente padrones de beneficiarios de diversos programas sociales. Por demás un delito electoral consumados a los que viene fabricando y realizando Cué Monteagudo a lo largo y ancho de su sucio gobierno.

PinochoGABINO LE APUESTA A LA IMPUNIDAD

Los diversos delitos que ha realizado Cué Monteagudo, se van sumando al archivo de la impunidad que con habilidad podrá hasta negociarlos con el gobernador entrante, que cabe señalar que de todos los candidatos a la gubernatura por Oaxaca el único que pidió cárcel para Gabino Cué y su pandilla fue el candidato del Partido del Trabajo (PT), Benjamin Robles Montoya, de ahí ningún otro candidato lo hizo.

Si Alejandro Murat Hinojosa resultara triunfador de estas elecciones del 5 de junio, sería fundamental que solicitara por lo menos una auditoria absoluta a Cué, ya que posiblemente el escenario de la cárcel se esfume, -Gabino no debería estar tan empachado de soberbia-, pero se hace necesario que varios funcionarios de su gobierno se le finquen responsabilidades de su mal y corrupto desempeño como funcionarios públicos.

Con ello, la confianza de muchos oaxaqueños volverá, porque no se repetirá la historia de Gabino Cué para llegar a la gubernatura, pues Pinocho utilizó como anzuelo de campaña y del voto que iba a ver justicia y metería a Ulises Ruíz Ortiz a la cárcel y le haría auditoria a su administración. Solo fueron mentiras y engaños, Ulises Ruíz negoció completamente su mala administración y salvó a sus funcionarios acusados de corrupción; Bulmaro Rito Salinas salió libre, libre del pecado de corrupción, y su administración ahora es ejemplo de una verdadera impunidad. Una administración premiada y ejemplo nacional.

Benjamín RoblesOAXACA NECESITA UN LÍDER COMO GOBERNADOR

A tan solo unas horas de que Oaxaca sepa y conozca quien será su gobernador por otros seis años, la población oaxaqueña ansia verdaderamente un cambio, pero no de moneditas que ofreció Gabino, necesita de un líder auténtico, visionario, que no le tiemblen las piernas ni las manos, que tenga decisión, que no se disfrace de lo que no es,  no necesita de un simulador, ni de un soberbio, pedante, y articulado maniquí de adorno… Oaxaca ya necesita de un progreso definitivo, no de intentos, líderes que hablen el mismo lenguaje de su gente, líderes de voluntad, y realidad.

Los errores catastróficos, la doble moral así como el doble lenguaje que caracterizaron a Gabino Cué, deben ser erradicados en un nuevo gobierno, repetir una historia de fracasos, de ineptitudes hará que Oaxaca se desplome por completo.

Cué Monteagudo es un fracaso de gobernador que debe pagar el robo y daño que hizo a los oaxaqueños, no puede haber impunidad tras impunidad… Un gobernador lleno de perversión y crueldad que se burló de su propio pueblo, que le mintió, que lo engañó, un gobernador farsante en toda la extensión de la palabra, un gobernante que gobernó con una pandilla de mafiosos… Un gobernante que debe ser investigado a fondo de todas las arbitrariedades e injusticias cometidas, de la cuenta y deuda pública, además porque se sabe que le apostó todo el recurso público para que su impunidad quede intacta, por ello no tuvo empacho en decidir quién le podía cuidar las espaldas, desde la elección de su amigo Estefan Garfias como candidato de una coalición fracturada, y de diputados a modo, a sus intereses para avalar sus caprichos… Así que el triunfo de cualquier candidato de esta elección permitirá que se acomoden denuncias, demandas, para enjuiciar amparos de impunidad… ese es el verdadero equinoccio de Gabino Cué Monteagudo… ¡Hasta la próxima!