Sexto informe, el desastre; Oaxaca no cambio
Gabino Cué entrega su farsa en el recinto legislativo
Sólo papeles llenos de mentiras y cifras y datos falsos.
Antonio Quintero
Las mieles que otorga el poder son vastas, a borbotones, a manos llenas para volverse locos, así es y efectivamente en esa saciedad se condecoran en sus riquezas, en su egocentrismo y se premian a sí mismos, la gloria de la abundancia, para vivir como reyes auténticos, en lujos, comodidades, fortunas y derroches.
Gabino Cué Monteagudo se engolosinó tanto, se empacho de poder, se olvidó que era gobernador, que había rendido protesta para hacer valer la Constitución pero también se olvidó que había sido candidato de una coalición que lo llevó al poder. Y gobernó solo; pero en una soledad compartida con sus cuates, amigos de infancia, adolescencia y disfrutó su sexenio como una auténtica luna de miel, posiblemente compartida o no pero las evidencias marcaron, manifestaron que hubo manos, cabezas, operadores que marcaron el destino de millones de oaxaqueños, dejándolos peor, en su ancestral miseria, pobreza eterna de la que no tienen derecho a salir. Él que repudió a todos, que no escucho, que no atendió, que simuló en gobernar una entidad llena de pobres y de miserables.
OBRAS FANTASMAS EN COMUNIDADES INDÍGENAS
Ese fue el gobernador que tuvo Oaxaca, que se aprovechó de la situación que convino a sus intereses, su gobierno tiene enorme cantidad de lecturas, pero todas en contra, la que pudo explotar no la realizó o la hizo añicos antes de realizarla; combatir la pobreza, un gobierno de paz y de progreso, nada se cumplió ni siquiera en alguno de los seis años en que gobernó o disimuló en gobernar.
Todo lo que tocó lo convirtió en desorden, en mentira, y construyó miles de farsas; para las zonas indígenas fueron las Cocinas comunitarias, aparentando ofrecerlas como un buen gobierno preocupado por su desarrollo pero no fue así, la gran corrupción que estuvo atrás de ese programa social fue rotundo, pretendiendo aparentar que su gobierno tenía sensibilidad social, no la tuvo pues favoreció con gran perversidad los negocios que envolvían ese programa.
Mismos programas que pasaron antes por la autorización y dispendio de despachos de asesores encuadrados a la voluntad del señor gobernador Gabino Cué Monteagudo. Negocios perfectos a la sombra y espaldas de su propio pueblo.
Gabino Cué Monteagudo no conoció la verdadera historia de las comunidades olvidadas, sumergidas en el abandono de muchos años, ni siquiera en campaña, pues desde entonces no le agradaba ensuciarse las zapatillas de polvo y lodo de esas comunidades, pero que contradictoriamente le dieron su voto.
GOBERNÓ CON RUFIANES
En esa alternancia improvisada Gabino Cué gobernó la entidad, con personajes y cabezas de partidos políticos principales como el Partido de la Revolución Democrática (PRD), Partido Acción Nacional (PAN), y otros partidos espontáneos que llegaron como cometas y que sirvieron a esa denominada alternancia, de transición, de cambio, frases que ellos mismos han acomodado para su beneficio, pero no fue así pues ese gobierno no fue siquiera de alternativa. Fue el peor gobierno del que se tenga memoria y que pasará a la historia como un gobierno nefasto en todos los órdenes.
En esa alternancia, en ese cambio, en esa transición todos esos facinerosos políticos de esos partidos políticos no entendieron nada para lo que llegaron al poder, por ello hicieron del poder un gobierno de corrupción en todas y en cada dependencia que sirvieron, que estuvieron como titulares, secretarios, directores, coordinadores y etc. etc. Se repartieron el poder, pero lo entendieron mal, porque no estuvieron preparados para entender el papel que llevaban, que representaban. Luego entonces no pueden tener ni siquiera el valor de ver a los ojos a los ciudadanos, no tienen la frente ni las manos limpias.
CONGRESO, OTRA CUEVA DE …
La repartición del poder, lo tuvieron sólo algunos, pues los más ambiciosos llegaron al congreso local, y ahí también hicieron lo que entendieron, pero básicamente llegaron a pudrirse en dinero, a corromper lo que tocaban, a entrar en la simulación de ser legisladores, y a obtener grandes canonjías y premios por cada voto para favorecer la permanencia del poder de Gabino Cué Monteagudo. En ello también estuvieron la fracción parlamentaria del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Así que en resumen dos legislaturas (LXI y LXII), estuvieron en amasiato con Gabino Cué, todas las fracciones y todos los diputados, coordinadores, tesoreros, estuvieron de plácemes con un gobierno impostor de la democracia, con un gobierno adulador, farsante, que no cumplió las expectativas que se vislumbraban para el pueblo de Oaxaca.
¿SEXTO INFORME DE QUÉ?
Con esos antecedentes de un pésimo y mal gobierno, Gabino Cué ya no pudo detener su triste figura, se le cayó su teatro, ya no llegó a presentar su sexto informe, ya no tuvo más mentiras para llegar a una nueva tribuna de diputados (como la LXIII Legislatura), legisladores que ya anunciaron su malestar, su irritación y realizarán el análisis de la glosa del sexto informe de gobierno.
Han dicho que no serán cómplices de nadie, según las diferentes fracciones que co-gobernarán con Alejandro Murat Hinojosa.
Al primer simulador de la entidad se le cae el disfraz de gobernador, difícilmente lo pudo llevar a cuestas, pues Gabino Cué Monteagudo vivió en su farsa, en sus mentiras, en sus epopeyas, y de llenarse la boca con lengua demagógica y acciones perversas que patentizó por largos seis años en una entidad llena de pobres, de enanos, de ignorantes, de escandalosos como alguna vez le atinaron a escuchar.
El simulador ya no pudo seguir de pie, ya no pudo caminar, ya no articuló, ya no pudo seguir en su máximo teatro de piruetas, de números de circo, de ocurrencias como las que se acostumbró por seis años, se consagró en la perversidad, y de cero resultados para la entidad oaxaqueña.
INSEGURIDAD Y VIOLENCIA
Entonces no puede informar nada, salvo que en este último año de su gobierno, la seguridad desapareció, las comunidades y municipios se sumieron en una de las peores crisis de violencia que tiene azorada a toda la población. Juchitan, Salina Cruz, Pinotepa Nacional, son ejemplos de la inseguridad fatal. No hay gobierno, no existe nada para contrarrestar la ola de violencia que se ha desatado, no hay programas, no hay capacitación para los cuerpos policiacos, no hay ni para la gasolina de patrullas en la propia capital del estado.
Que puede informar un gobernador como Gabino Cué sino le importó en lo absoluto su propio pueblo a estas alturas lo que le importa es irse de vacaciones a Hawaii o algún otro lugar que no sea Oaxaca.
El desastre financiero en la Secretaría de Seguridad Pública (SSPO), desde el primer secretario que estuvo en esa dependencia como Marco Tulio López Escamilla que salió sin la menor fiscalización de su trabajo, pues recibió los primeros recursos millonarios de esa secretaría, luego vendría Alberto Esteva Salinas que tampoco rindió ninguna declaración a su discutida labor, dejando enormes huecos financieros que nunca se investigaron y que presentó su renuncia vía twitter por último el actual secretario Jorge Alberto Ruíz que también se caracterizó por no rendir cuentas a nadie, su trabajo fue gris pero que fue más allá su gestión pues brilló por su ausencia perfectamente igual a la de sus subordinados los policías que nunca llegan a tiempo en ningún lugar.
Finalmente tres personajes oscuros, ineptos, que llegaron a cobrar jugosos sueldos con una política de seguridad pública enmarcada por su propia taruguez, sin ningún conocimiento en programas contra la delincuencia, una secretaría obsoleta con resultados muy negativos en contra de la misma ciudadanía.
GRAVE VIOLACIÓN AL DERECHO A LA SALUD
El atropello más grande que se le pueda señalar a Gabino Cué Monteagudo en el marco de su gobierno y en perjuicio de la propia población es sin lugar a dudas el sector Salud, quien quiera gobernar una entidad no puede soslayar ni pensarlo dos veces sobre la implementación de programas sobre Salud y básicamente toda la infraestructura hospitalaria que tiene que ver con el bienestar de habitantes de regiones y comunidades. Gabino Cué mintió y construyó una farsa sobre la rehabilitación de los hospitales inconclusos que había heredado de Ulises Ruíz Ortiz, pero con su desfachatez admitió en rehabilitarlos pero no fue así, ya que desde el primer año no supo entender la crisis y vicios enormes que existía en ese sector, y se encadenó a una serie de irregularidades que le recomendaba su amigo y asesor, Jorge Castillo, y su secretario de Salud Germán Tenorio Vasconcelos, que hasta el último minuto en su permanencia en esa secretaría mantuvo un poder de corrupción terrible que expuso públicamente al ser asesinado su segundo de a bordo Rafael Pérez Gavilán Escalante, con ello se entendió la gigantesca corrupción de muchos poderes facticos inmersos ahí desde el propio sindicato de la sección 35, y funcionarios recomendados.
Se desaparecieron mil quinientos millones de pesos, y nadie sabe dónde quedaron, lo cierto es que el gobierno de Gabino Cué Monteagudo no pudo activar la red hospitalaria de más de 17 hospitales inconclusos en varias regiones de la entidad.
Tampoco le interesó investigar ni trasparentar el recurso financiero que recibió dicha secretaría, y mucho menos a su amigo Tenorio Vasconcelos, Gabino permaneció como observante, de los sucesos de corrupción en esa secretaría. Y puso a un incondicional también recomendado por su amigo asesor, el ingeniero Héctor González Hernández que nada sabe de Salud pero que le sirvió para obtener beneficios para la camarilla de Gabino Cué. Entonces se entiende que en el sector Salud existen mafias para controlar el recurso financiero, negociando el respiro, la gobernancia y la salud de millones de oaxaqueños.
OAXACA NO CAMBIÓ
Ante el panorama crudo, miserable en que deja Gabino a la entidad, sólo queda contar los días en que ya se vaya a su casa, no puede haber tanto desastre como el que ya dejó, pero todo lo que sucede a su alrededor le vale un cacahuate pues Gabino debió apellidarse el magnífico; Gabino el magnífico, para él hubo resultados incluso tangibles, en su sexto informe habla maravillas de su sexenio, de su ardua labor, Gabino se alaga, se eleva y se dice encontrar en la cúspide, se vanagloria, se jacta posiblemente para él no hubo un gobernador que mintiera tan perfectamente, que simulara en ser gobernador porque quienes gobernaron fueron otros, sus amigos.
Por ello en esa jactancia brutal Gabino Cué se despide de su audiencia con un spot en la radio comercial, anunciando su sexto informe de resultados, su voz ya es una burla para el pueblo, escucharlo es entender su desprecio por su propio pueblo, ahí está su vanidad y presunción de un gobernador que simuló e hizo cátedra de gobernar en la simulación, lo único que pudo hacer porque ya no tuvo los tamaños para ofrecer y presentar su informe en el recinto legislativo local.
El gobernador mediocre de la alternancia frustrada se larga, como sucede con los canes con la cola entre las patas, porque le falló a su pueblo, a su población, a su también mediocre partido político, que también desapareció, deja una entidad en desastre total, con números rojos, endeudado, sin cero progreso, sin paz, como lo anunciara su slogan de campaña.
¡¡OAXACA NO CAMBIO EN NADA!!
Por supuesto que no cambio en lo absoluto, porque simplemente no atendió las más importantes demandas sociales, no cumplió en nada, por eso Oaxaca no cambio, no hubo resultados de ningún tipo… para su ego Oaxaca es ya de primer mundo… la realidad es otra, la realidad se encuentra en las afueras del palacio de gobierno, ahí frente a sus narizotas, pero como todos los simuladores también padecen miopía… Lo absurdo, detestable de Gabino Cué un impostor que presentó un informe plagado de mentiras, un gobierno de apariencias que seguramente será analizado por el actual congreso local donde ya exhibieron su negligencia, su abandono, su corrupción… Su gobierno al igual que a él se le debe fincar responsabilidades, para terminar con el saqueo que han hecho muchos gobernadores, su impunidad no debe ser negociada, si es que ya negocio impunidad a costa de entregar el poder y cero investigación a su gobierno… ¡QUE MÁS! …¡hasta la próxima!