Política Inconfesable: Perverso, traidor y chicanero…


Rodrigo Villar

El tiempo que no tiene piedad, pone a todos en su lugar y nos adjudica facturas a pagar.

Desafortunados debemos considerarnos los oaxaqueños que tuvimos que pasar el infierno con un gobernante tramposo y enfermo, cuyo nombre es Ulises Ruiz Ortíz, conocido en el submundo como el chacal de Chacaltongo.

Somos, todos quienes vivimos aquí, sobrevivientes de las tropelías, excesos –de todo tipo, del que usted llegue a imaginarse- y podredumbre de ese oscuro personaje que representa a la perfección la imagen del cacique carroñero que atiende solo a sus nefastos intereses personales, y cuando le da para poco mas, a los de sus cómplices que son aprendices de corruptos.

Hasta ahora habíamos atestiguado con asombro como el sistema político había tolerado a un sujeto de la calaña del chacal de Chacaltongo.

Sus conocidas malas artes en el terreno de la operación electoral, que le dieron fama de mapache electoral por las bajas prácticas de compra de votos, chantaje y cohecho que desplegaba para favorecer a determinados candidatos.

También conocimos las chicanas que le endilgó a su compañero y amigo, Roberto Madrazo Pintado, quien lo encumbró de una forma abyecta para colocarlo en la candidatura al gobierno de nuestro estado.

Chicaneo a quien confió en él dándole la espalda y apuntando a su benefactor de una forma grosera y desleal.

Durante su abominable paso por la gubernatura de Oaxaca, Ulises el chalcal de Chacaltongo, usufructuó el poder público para beneficiarse con el dinero del pueblo.

Enriqueció a su familia, a sus colaboradores, transó con empresarios sobe todo constructores y empoderó a un grupo de personajes de baja ralea y estatura política, quienes se dedicaron a asaltar las arcas públicas y a endeudar más a nuestro humillado estado.

Ulises y Eviel Pérez Mañana

Su círculo de empleados, a quienes trataba con la punta del píe mientras le servían en la administración pública se integró de personajes de un gran talento como la hachepona, Héctor Pablo Ramírez Puga Leyva, hoy rescatado y colocado en la dirección de Liconsa.

También entre los afectos abyectos de Ulises Ruiz se encuentra Eviel Pérez Magaña, el ex candidato del PRI, PERDEDOR en la elección pasada, quien ingenuamente sigue creyéndose el cuento de que contenderá por la gubernatura.

Pero esos hombrecillos no son lo relevante en estas líneas.

El fondo es recordar que el chacal de Chacaltongo levantó un imperio de corrupción en su entorno.

Se dio el lujo de construir un hospital en el sur de la Ciudad de México. Y también en otra de sus múltiples facetas oscuras ideo una estructura de represión que puso en vilo al estado durante los últimos seis años.

Se le atribuyen hechos de sangre y violencia que no se olvidan y por ellos aún tendrá que responder ante el reclamo de miles de oaxaqueños.

Y ahora la ultima del chacal.

Dice que fue capaz de doblar a la Suprema Corte de Justicia de la Nación con objeto de emprender una venganza –que solo su perversa mente puede maquinar- para frenar la aspiración de una propuesta joven, preparada y fresca para gobernar Oaxaca.

Lo que resulta abominable es cómo un partido como el PRI, que tiene ante sí un hándicap frente al reto de conservar el poder y demostrar a los mexicanos que si aprendió la lección  tras su derrota el año 2000, mantenga a un sujeto despreciable, corrupto y violento como Ulises Ruiz Ortiz en posiciones como una delegación de ese partido en Quintana Roo.

Solo esto sucede en un país como el nuestro. Donde se descubre que un integrante de un partido conspira contra otro de sus correligionarios porque lo considera peligroso en la preservación de sus intereses mezquinos.

La llamada telefónica en que fue pillado el vulgar Ulises Ruiz Ortiz, incluso burlándose socarronamente del presidente nacional del PRI, Manlio Fabio Beltrones, a quien prácticamente le ordena que dé el golpe final a quien aspire a un cargo público aduciendo el derecho de sangre, sienta un precedente ominoso –otro más-, de los excesos que tiene sumida a la política en la mediocridad.

Los ciudadanos esperan que el poder político en este país reaccione ante las barbajanadas del chacal de Chacaltongo.

Resulta que lastimero y lastimoso para Oaxaca que Ulises se sienta  omnipresente o omnipotente para decidir que habrá de suceder en nuestro estado el año próximo.

Primero le enmendó la plana –dice- a Suprema Corte y después le ordena al presidente del PRI, Manlio Fabio Beltrones que culmine con su obra.

Jajajaja –permita soltar una carcajada-, porque creo que se va a equivocar este sujeto y ya lo veremos en unos cuantos meses.

El tiempo que nada perdona decidirá.

30525063. Tijuana.- El coordinador de los diputados de la bancada del PRI, Manlio Fabio Beltrones visitó Baja California para brindar su apoyo y total respaldo al candidato a la Gubernatura del estado, Fernando Castro Trenti. NOTIMEX/FOTO/ESPECIAL/COR/POL/