Mueren 11 personas en ataque ruso contra ciudad natal de Zelensky


Trabajadores de emergencia inspeccionan un edificio residencial dañado por el último ataque con cohetes rusos en Krivói Rog, Ucrania, el 13 de junio de 2023. Foto Ap

AFP / La Jornada

Kiev. Al menos once personas murieron en la madrugada de este martes en un ataque ruso contra la localidad de Krivói Rog, ciudad natal del presidente Volodymir Zelensky, en el centro de Ucrania, donde un misil destruyó un edificio de apartamentos.

Ucrania reportó también ataques nocturnos en Járkov (noreste) y Kiev, donde se espera la visita del director general del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), el argentino Rafael Grossi.

Por su parte, Rusia reivindicó el martes la captura de varios tanques alemanes Leopard y vehículos de combate de infantería estadunidenses Bradley, y divulgó imágenes de soldados rusos inspeccionando los aparatos suministrados a Ucrania por países occidentales.

En Krivói Rog, una localidad situada en la región de Dnipropetrovsk (centro-este), un «ataque masivo de misiles» alcanzó varios sitios de la ciudad y en particular un edificio residencial, según las autoridades locales.

Según el gobernador regional Serguii Lyssak, el bombardeo dejó once muertos.

Dos balances anteriores daban cuenta de tres y seis muertos.

La administración regional publicó una foto del edificio dañado y ennegrecido por las llamas, con humo saliendo de los pisos.

Además de este edificio, la administración de Dnipropetrovsk identificó otros dos sitios «civiles» afectados por las explosiones.

Después de los bombardeos, Zelenski afirmó que las fuerzas rusas están librando una guerra contra «edificios residenciales, ciudades ordinarias y personas».

«No olvidaremos a los terroristas, asumirán su responsabilidad por cada misil que hayan lanzado», declaró en un comunicado difundido en redes sociales.

En Kiev, la administración militar informó también de ataques nocturnos con «misiles crucero», aunque aseguró que «todos los blancos enemigos en el espacio aéreo alrededor de Kiev fueron detectados y destruidos exitosamente».

Por su parte, el alcalde de Járkov (noreste), Igor Terejov, reportó un ataque de drones «contra infraestructuras civiles» y que resultaron dañados un hangar y las instalaciones de una empresa.

Contraofensiva «difícil»

Estos ataques se produjeron poco antes de que Moscú afirmara que capturó varios tanques alemanes Leopard y vehículos Bradley de Estados Unidos.

«Tanques Leopard y vehículos de combate de infantería Bradley. Estos son nuestros trofeos. Equipo de las fuerzas armadas ucranianas en la región de Zaporiyia», indicó el Ministerio ruso de defensa en un comunicado.

Kiev ha pedido a sus aliados occidentales brindarle una amplia gama de equipo militar moderno para ayudar a las fuerzas ucranias a retomar las grandes extensiones de su territorio conquistadas por las tropas rusas.

La noche del lunes, el presidente Zelensky aseguró que la contraofensiva en marcha contra las tropas rusas era «difícil» pero «avanza».

Poco antes, el gobierno ucraniano afirmó que había retomado siete pueblos en el sur y en el este del país. Según el portavoz militar Andriy Kovalyov, el área reconquistada en el este y en el sur de Ucrania abarcaba «más de 100 kilómetros cuadrados».

Además, el Ministerio de Defensa afirmó que las fuerzas ucranianas avanzaron «de 250 a 700 metros» en la región oriental de Bajmut, en dirección a la ciudad del mismo nombre, en torno a la cual los dos bandos libran una de sus más feroces batallas desde el inicio de la guerra.

Visita del director del OIEA

Los planes de Kiev de reconquistar territorios se complicaron por la destrucción de la represa de Kajovka, en el sur de Ucrania, la cual provocó importantes inundaciones, en áreas controladas tanto por los ucranianos como por los rusos.

Según los últimos balances, las inundaciones causaron la muerte de 17 personas en la zona bajo control ruso y de 10 en la que controla Ucrania.

Según analistas militares, Ucrania aún no ha lanzado el grueso de sus fuerzas en su contraofensiva, y actualmente está probando el frente con ataques dirigidos para determinar los puntos débiles.

En tanto, el OIEA confirmó el lunes que su director, Rafael Grossi, viajará el martes a Ucrania para inspeccionar la central atómica de Zaporiyia y analizar el impacto en ella de la destrucción de la represa de Kajovka en el río Dniéper.

Luego de visitar la capital ucraniana, el jefe del OIEA irá a la central ZNPP, ocupada por los rusos, «para evaluar la situación y organizar una nueva rotación de expertos».

Desde el inicio de la invasión, Grossi no deja de advertir sobre el riesgo de un accidente nuclear en esta planta del sureste de Ucrania.

La destrucción de la represa de Kajovka no ha tenido hasta ahora ningún efecto en el estanque de enfriamiento de la planta.