Constitución de 1917 muy lejana a la Carta Magna de nuestros días.
Insisten en recortar dinero a partidos; líderes oyen pasos en la azotea.
Ubaldo Díaz
Ante un auditorio de empresarios del campo, el cual ha dejado divisas por encima de las que obtiene México por concepto de turismo, de petróleo, la producción de productos agropecuarios, ha llegado a superar los 28 mil millones de dólares, ahí el Presidente Enrique Peña Nieto, ratificó que ha sido puntual en la defensa de los intereses de los mexicanos y continuará por ese camino. Los gritos de los integrantes del Consejo Nacional Agropecuario no solamente fueron efusivos, sino de un total respaldo al Ejecutivo Mexicano.
Peña Nieto no acudió al discurso ramplón, a las frases comunes de reprobación del discurso de Donald Trump, lo evadió para hablar de la situación mexicana, de plantear a donde quiere llevar al país, al desarrollo y contar con empleos bien remunerados. Y recordó que el próximo domingo, los norteamericanos consumirán durante la transmisión del superball, más de cien millones de toneladas de aguacates, además de muchos otros productos. No son momentos de cerrar las economías, sino de competir para que “todos ganemos. Voy a defender con toda la soberanía nacional, a todos los mexicanos”. vimos a un presidente firme, sin regateos, apoyado por decenas de productores y empresarios que lo aplaudieron muchos.
CONSTITUCIÓN DE 1917; VIOLACIONES
Este fin de semana, se conmemoran los cien años de la Constitución general de la República, que se ha reformado tanto en los últimos 25 o 30 años que ya se adaptó al sistema neoliberal y eso ha provocado un choque muy grave para la sociedad mexicana que está padeciendo estas nuevas reglas. Se destruyó la Constitución del 17 y se hizo una Constitución nueva, prácticamente, en la cual ya no es el interés de la gente lo que se busca, sino el interés de un sector de los empresarios, básicamente.
celebramos con bombo y platillo un siglo de vida de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, no obstante, para ser francos de aquel documento promulgado por Venustiano Carranza el 5 de febrero de 1917 ya casi no queda nada. Ahí en Querétaro, en el Teatro de la República se van a dar cita los representantes de los poderes legislativo, ejecutivo y judicial y es buen momento para hacer y para rescatar aquello que tiene sustento en nuestra Carta Magna.
No olvidemos que se trata de un texto redactado cuando aún no se extinguía la etapa armada de la Revolución Mexicana, mismo que incluía un proyecto de nación, opuesto al porfirismo y al liberalismo económico (no político) que había desembocado en una revuelta social. Así surgió la que fue llamada la primera Constitución social, con una visión de economía mixta donde el empresariado estaba acotado, pero sin llegar a una economía socialista.
Pero el constitucionalista Bernardo Bátiz Vázquez, reconoce que las libertades individuales deben seguir vigentes, pero deben ser ya no nada más, como fue en 17, frente al Estado, sino también frente a los poderes facticos, porque son los que están manejando ahora la economía y, a través de ella, la política.
PROPONEN RECORTAR DINERO A PARTIDOS
El Senador por Chiapas, Luis Armando Melgar, se sumó el día de ayer a la propuesta para reformar el artículo 41 de la Constitución, con la que se pretende recortar el financiamiento público a los partidos políticos para dirigirlos a rubros como el fortalecimiento del mercado nacional o la defensa de los mexicanos en el exterior, tan necesaria esta última en la denominada «Era Trump».
El tema, que se detonara a propuesta de un grupo de legisladores panistas encabezados por Roberto Gil y Ernesto Cordero, suma cada vez más voces a su causa y se convierte ya en una postura seria de diferentes bancadas en el Congreso de la Unión, situación que ha puesto a temblar a más de un dirigente partidista.
PROSELITISMO DE AMLO
El proselitismo vergonzante de López Obrador en Estados Unidos.
No cabe duda que Andrés Manuel López Obrador sabe aprovechar, y bien, las coyunturas políticas para llevar agua a su molino. Y como de costumbre actuar con doble moral y oportunismo. El tabasqueño recientemente se pronunció por la unidad de los mexicanos como convocó el presidente Enrique Peña Nieto. Muchos aplaudieron su disposición y otros no le creyeron ni una palabra, y tuvieron razón los que no confiaron en las palabras del hombre de Macuspana.
Está claro que Obrador llamó a la unidad, pero ahora se ve que fue una convocatoria para su causa. No hay otra explicación, al anunciar que hará campaña en Los Ángeles, California, donde seguramente hablará a su favor. Nunca a favor del presidente Peña. Sin duda. El tabasqueño trabaja para él. Imposible pensar que cumpla su palabra de apoyar al Presidente mexicano, a pesar de reconocer que Peña es el que nos representa y que había que apoyarlo para enfrentar a Donald Trump.
Obrador argumenta que viajará a Los Ángeles a decirles a los connacionales la necesidad de unirse contra la política intolerante y discriminatoria de Donald Trump, pero lo hará a favor de su causa, no a favor de México. Siempre ha sido así: ventajoso, oportunista e impositivo, así lo describen sus amigos tabasqueños de su época universitaria, cuando estaban en la Casa del Estudiante en la Plaza del Carmen de la Ciudad de México.
