Las Fotos: Sabía virtud de conocer el tiempo…


¿Para qué es el poder?

Para los inseguros para tener notoriedad… Para los avaros, para enriquecerse… Para los soberbios, para llenarse de más prepotencia… Para los violentos, para lograr impunidad… Para los miserables, para esconder esa miseria.

Para nadie es un secreto que la soberbia es el pecado favorito del Diablo y en nuestro ambiente hay uno que otro que, a la sombra del poder, busca favores a cambio de impunidad e inmunidad «periodística».

A estas alturas, en el parque estatal conocido como el Llano, se hace un grandioso negocio como lo que hizo Rockefeller para, en su tiempo, se convirtiera en uno de los hombres más ricos del mundo… Así ocurre con el ya famoso trenecito de El Llano (la publicidad es gratuita), donde gracias  a una concesión se obtienen diariamente miles, que decimos miles, millones de dólares, que a largo plazo, lograran construir un tren de verdad que conecte a la ciudad de Oaxaca con Nueva York, estos si son negocios de verdad.

Por cierto, la propietaria del negocio es Lilian de Monserrat Marín González, panista de corazón y priista por interés… En el trienio 2014-2016, Monserrat Marín, fue regidora suplente de seguridad Pública, Vialidad y Protección Civil, tiempo después, dicen los que saben, puso una tienda de vestidos de marca bastante caros… Aquí la interrogante estriba ¿Sacristán que vende cera y no tiene cerería, de dónde? pues de la sacristía.

No nos crea, pero afirman que de esta concesión sabe mucho Javier Villafaña Jiménez, todavía Secretario de Administración del gobierno del estado.

Un tren, una moto, un yate en Huatulco, traficar con los compadrazgos y algunos perros Fila para regalo, son bonitos juguetitos ¡aunque ud. no lo crea!