Las ambiciones personales, nunca más


Margarita y Juan Ignacio Zavala Gómez del Campo
  • La pareja Calderón-Zavala intenta crear nuevo partido político.
  • Están  por reunir 100 mil firmas, pero en contra de su proyecto.
  • Julio Cortázar escritor argentino que murió hace 35 años en París.

Reportajes Metropolitanos

Carlos Ravelo Galindo, afirma:

Díganos si no tenemos razón. Lo siguiente no nos deja la menor duda.

“Entre paréntesis ya llegaron los hermanos Zavala. No los de Teresita, que cantaban. Sino los de Margarita que quieren vivir de política como ella y Fecal”

Nunca más, añadiríamos.

Precisamente cuando se conmemora la Carta Magna de1917, –la de Venustiano Carranza– resulta oportuno el análisis-comentario del periodista y presidente del Colegio Nacional de Licenciados en Periodismo –CONALEP- don Teodoro Rentería Arroyave, sobre los partidos “políticos” familiares.

Compartirlo íntegro representa una demanda nacional.

Sí: Nunca más partidos políticos familiares, ni las ambiciones personales..

Coro de los Hermanos Zavala

Leamos con detenimiento el citado texto:

“En nuestro país, después de la reforma de la ley electoral que impulsó el bien recordado maestro Jesús Reyes Heroles, los aprovechados de siempre la degeneraron para crear partidos políticos familiares, obvio, con el financiamiento que les regalaba la nueva legislación.

Sin mayor investigación, es de afirmarse que sólo en nuestro país están financiados los partidos políticos, decisión que se tomó para que se dejara de señalar al Partido Revolucionario Institucional, PRI, en el poder, como el único con recursos gubernamentales para asegurar su vigencia y hegemonía.

No negamos el espíritu de la Ley Reyes Heroles, en su fundamental meta de democratizar al país, sin embargo quedaron muchos vacíos que fueron aprovechados por familias o grupos para crear partidos políticos, sin mayor esfuerzo, la ley les asegura el financiamiento.

Ese mandato constitucional se vituperó, a tal grado, que ahora los Calderón, Felipe y Margarita están inmersos por crear su propio partido político en traición, cuando menos de la cónyuge, que aseguró, al crear su asociación política de que nunca se convertiría en partido político.

Ante la traición a su compromiso público, ahora los cónyuges Felipillo y Margarita han tenido la desfachatez de anunciar que su asociación civil, México Libre, lo convertirán en partido político.

Los Calderón-Zavala, tras registro de un nuevo partido político

Informan los medios, que el pasado martes, el ex presidente Felipe de Jesús Calderón Hinojosa pidió a los mexicanos registrarse en la página de su nuevo partido político “México Libre”, para recolectar por lo menos 300 mil firmas.

Es el caso que el repudio a la pareja Calderón se ha manifestado: a la fecha, según ellos tienen algo así como 46 mil firmas.

En tanto que los medios libres han contabilizado 90 mil rúbricas, en la página Change.org, pero en contra de tal despropósito.

Es decir, los firmantes exigen cancelar la creación de esta fuerza familiar, dos a uno.

En dicho portal, hay una campaña para pedir al Instituto Nacional Electoral, INE, cancelar el registro del partido “México Libre” -de los Calderón-, porque señalan, que sus líderes presuntamente están involucrados en el narcotráfico y en muchos casos criminales que, hasta la fecha han quedado impunes.

Instituto Nacional Electoral

Cito textual:

“Pedimos la cancelación de ese partido político por tener vínculos con el narco, ser saqueadores de la patria y permitir tanto asesinato incluyendo la Guardería ABC.

“Delincuentes no deben trabajar para el pueblo, y menos esos dos por todos los muertos y desaparecidos en su sexenio”, indica el comunicado.

El INE está en el vértice de su actuación política.

Registrar el partido de los Calderón lo colocaría en las ruindades de intereses de la derecha abyecta preconcebida.

Por el contrario, negar como sería congruente con la moral pública elevaría la calidad del órgano rector comicial de nuestro país.

Claro que es un justo reclamo:

Nunca más un partido familiar en México.

Carol Dunlop

 CUANDO  CALLAN LAS NOTICIAS

Carlos Ravelo Galindo, afirma:

Hartos de tanta sangre, gasolina, robos y falta de integridad de todos, mejor hablemos sobre cultura. Un remanso de paz

Es totalmente cierto que la literatura puede decir lo que las agencias de noticias callan y el experto José Antonio Aspiros Villagómez nos lo demuestra en agradable e instructivo relato sobre Julio Cortázar, el escritor argentino que nació en Bruselas y vivió y murió en París hace 35 años, pasó dos meses en California donde impartió en 1980 un curso para estudiantes de la Universidad de Berkeley.

Habló del derecho de todo escritor a la libertad y a cumplir con su deber en los terrenos ideológico y literario. Consideró muy “alentador y hermoso” que ya varios latinoamericanos dedicaran parte de su obra a mezclar la literatura con “las luchas y el destino de sus pueblos”, si bien a su parecer los mensajes políticos eran más propios del panfleto, el ensayo o la información

Por supuesto su materia fue la literatura y, si bien su auditorio se redujo a un centenar de alumnos que tuvieron el privilegio de estar presentes, muchos más hemos podido conocer de manera textual aquellas charlas de gran interés para quienes gustamos de la narrativa y apreciamos la obra del autor.

Jesús Reyes Heroles

Aun cuando Cortázar estudió Letras y Magisterio, e impartió clases en Argentina antes de establecerse definitivamente en París en 1951, por mucho tiempo rechazó la invitación para dar ese curso en Estados Unidos, pero la insistencia lo doblegó y a la edad de 66 años (murió a los 70) convino en impartir dos conferencias y ocho clases.

Para recordarlo en su aniversario luctuoso (12 de febrero de 1984), elegimos comentar esa otra veta del “gran cronopio”: la cátedra, a la que acudió acompañado de su tercera esposa, la polifacética estadunidense Carol Dunlop, quien murió prematuramente y antes que él, a los 36 años.

Ella, fotógrafa, escritora, traductora y activista, tomó precisamente la foto de Cortázar en el aula de Berkeley que aparece en la portada del libro Clases de literatura, que la editorial Alfaguara publicó en 2013 con la transcripción de las trece horas de grabaciones hechas con todo lo que dijo él en aquel curso, incluidas las preguntas de algunos alumnos y las respuestas que dio.

Clases de literatura

Por las 312 páginas del libro desfilan las explicaciones sobre sus tres etapas como escritor: estética, metafísica e histórica, y comenta sus propios libros; explica lo necesario para comprender mejor Rayuela y a Oliveira y la Maga (escribió el libro con papelitos que llenó de apuntes durante años, sin saber para qué, y al final fue una obra de preguntas que dejó las respuestas al lector, al contrario que los libros de Thomas Mann), lo mismo que Libro de Manuel que mucho le criticaron la derecha, la izquierda y sus propios amigos hasta dejarlo amargado por tomar a broma la política, y La vuelta al día en 80 mundos, producto, en parte, de su afición por la criminología.

A un alumno que preguntó sobre la “intención revolucionaria” de su trabajo, le habló del derecho de todo escritor a la libertad y a cumplir con su deber en los terrenos ideológico y literario. Consideró muy “alentador y hermoso” que ya varios latinoamericanos dedicaran parte de su obra a mezclar la literatura con “las luchas y el destino de sus pueblos”, si bien a su parecer los mensajes políticos eran más propios del panfleto, el ensayo o la información.

Al respecto, habló de los poetas Roque Dalton y Ernesto Cardenal, leyó completo su cuento lugar donde el sacerdote y poeta nicaragüense evangelizó al pueblo con la Teología de la liberación) y a otro alumno que lo criticó por enfocarse en un solo punto de vista, le dijo que habría que introducir una dimensión moral en la discusión del tema, para determinar quién había comenzado la violencia cuando estaban dos fuerzas en lucha.

Julio Cortázar

Y habló sobre cuándo y por qué (las dictaduras de los años 70) dejó el individualismo para adquirir una conciencia histórica de la responsabilidad social. No soslayó el caso del poeta Heberto Padilla y consideró que tanto él como el gobierno cubano habían cometido equivocaciones, que no se iban a repetir.

Cuando se refirió al Libro de Manuel (“imperfecto” porque lo escribió contrarreloj), dijo que había puesto al final un apéndice con testimonios sobre la tortura en Argentina y Vietnam, porque las agencias de noticias sudamericanas y de Estados Unidos no lo iban a informar.

La literatura, dijo el escritor, puede reemplazar la falta de comunicación periodística.

 

craveloygalindo@gmail.com