Política Inconfesable : (I) Responsabilidad de gobierno y sociedad


No todos acatan medidas sanitarias

Rodrigo Villar

Vacunas

La razón del bien común tiende a preservar las relaciones más humanas entre seres humanos. Entre ellas el derecho, la libertad, el respeto, la dignidad, el cuidado de los demás, entre otros factores que nos llevan a concluir que seguimos siendo partícipes de la comunidad de mujeres y hombres, que compartimos una historia social.

Y es precisamente entorno a la (i…) responsabilidad del cuidado de los demás que se debe alentar la protección a la salud. Para no darle más vuelta al asunto: el pobre manejo de la pandemia en el sector central de los servicios de prevención y de atención a la salud del gobierno, ha provocado que la prevalencia de Coronavirus en un sector creciente de la población arroje un mayor número de contagios y en consecuencia más personas que requieren manejo intrahospitalario, y por tanto más riesgo de muerte.

Lo que sucede en México, no es gratuito, y no sólo responsabilidad de la autoridad. Sin duda ésta tendrá mucho que aclarar una vez resuelta -medianamente con la vacuna- la emergencia provocada por ese mal letal. Como señalaba arriba, las deficientes acciones gubernamentales, combinadas con el pésimo ejemplo que han dado sus principales funcionarios, quienes han negado efectividad al uso del cubre-bocas, son detonante de una probable bomba de tiempo que se viene activando en época de frío.

Marcelo Ebrard

Al concluir noviembre, habremos sobrepasado la trágica cifra de los 106 mil personas muertas -según las cifras que aporta la misma autoridad, y a la que un sector de la población no cree o desconfía de esos números-, y los contagios crecen mientras con preocupación observamos postales en los periódicos y en los medios electrónicos, donde la población sale a las calles en masa, sin protección alguna, con la consecuente falta de respeto al resto, lo que no depara nada bueno para todos en los meses por venir.

A ver, no sólo en México, sino en el mundo nos han sobado con la idea peregrina de que las vacunas están por ser autorizadas, que ya tienen una efectividad del 95 por ciento, que la van a aplicar a fines de diciembre. Son promesas verbales. No hay nada que nos lleve a visualizar un futuro prometedor, que contemple la solución farmacéutica a tan demoledor problema de salud pública mundial.

Es tanta la desesperación en las esferas del poder público, que el secretario de Relaciones Exteriores (que no canciller), Marcelo Ebrard se ha dado a la tarea de desinformar, para crear más confusión, asegurando que a fines de año ya habrá vacuna, y por qué no, que en México la habrá porque el gobierno ya pago un apartado de esos productos antivirales.

Saturación de hospitales

Pueden decir misa. El problema es que el número de enfermos aumenta y el pobre y parchado sistema hospitalario esta comenzado a vivir un momento en el que la línea del desbordamiento y el control están muy cerca una de otra. Y peor aún, justo cuando se podría acceder a una vacuna que enfrente una cepa mutada del virus que provoca el Coronavirus, la narrativa de las autoridades nacionales y de la misma Organización Mundial de la Salud (OMS), nos comienzan a anunciar que el mismo virus se encuentra en una etapa de mutación, lo que significa que se requerirá más tiempo para que las farmacéuticas continúen investigando y sin que seas gratis -porque siempre se beneficiaran-, y en los próximos años encuentren vacunas que por lo menos, como sucede con el virus de la influenza, tengamos más opciones de enfrentar al Covid 19.

Por lo pronto, estimados lectores, es necesario que seamos responsables, no sólo con nosotros mismos, ni con nuestros hijos, no con nuestras familias, es urgente que abandonemos el camino de la estupidez, el que muchos han tomado, abrigados por el prurito de que “el Covid no existe; a mí no me pasa nada…”

Transformación de nosocomios

Cuántas veces hemos escuchado esas frases tan abyectas, que solo nos pintan como una sociedad irresponsable, que no es capaz de cumplir al pie de la letra la advertencia de solo salir de casa en situaciones indispensables, usar cubre-bocas, lavarse las manos continuamente, usar gel o alcohol, respetar la distancia de por lo menos metro y medio o estornudar de etiqueta.

Me pregunto, cómo saldremos de ésta, si no tenemos claro de que la RESPONSABILIDAD  ES DE TODOS, gobierno y sociedad, depende que enfrentemos esta pandemia con menos resultados negativos.