Septiembre 11 de 1973 golpe de estado de Augusto Pinochet
Encabezó Pinochet una dictadura que duró 17 años.
Documental sobre Salvador Allende tuvo gran acogida en Cannes.
Agencias
Hasta los atentados del 11-S en Estados Unidos, esa fecha simbolizaba solamente la afrenta sufrida por la democracia chilena. Aquel septiembre de 1973 en que el gobierno izquierdista de Salvador Allende fue derrocado por el golpe de Estado del general Augusto Pinochet. Las imágenes del asedio aéreo al Palacio de la Moneda forman parte del imaginario colectivo chileno. Este viernes, 42 años después, Chile vuelve a rendir homenaje al presidente socialista y recuerda a los más de 3 mil muertos que dejó la dictadura (1973-1990).
La figura de Allende sigue vigente. Hace unos días se estrenó con éxito de público la película «Allende, mi abuelo», un documental realizado por la directora Marcia Tambutti, nieta del líder socialista. La película viene precedida de una gran acogida en el festival de Cannes. Y hace unos meses se publicó también en Chile el primer cómic dedicado a la experiencia socialista del Gobierno de la Unidad Popular y al golpe militar que lo derrocó.
HOMENAJEA BACHELET A SALVADOR ALLENDE
La presidenta Michelle Bachelet, cuyo padre fue un militar leal a Allende y torturado durante la dictadura, presidió el pasado viernes en el patio de Los Cañones de La Moneda la ceremonia interreligiosa en recuerdo de quien fuera presidente de Chile entre 1970 y 1973.
El homenaje institucional, al que asistieron más de 500 líderes políticos y sociales, coincide este año con la tramitación parlamentaria de un proyecto para crear la Subsecretaría de Derechos Humanos, como parte del giro del Estado chileno frente al «silencio» administrativo por los delitos de lesa humanidad cometidos durante la dictadura. Una iniciativa que el gobierno de Bachelet, con la popularidad por los suelos por la ola de corrupción, deseaba haber aprobado antes de las conmemoraciones de hoy. Pero el proyecto de ley se ha visto frenado por la oposición conservadora y su aprobación todavía deberá esperar unas semanas.
«Lo más probable es que podamos aprobar la creación de la Subsecretaría de Derechos Humanos durante este mes de septiembre», ha explicado la ministra de Justicia, Javiera Blanco, impulsora de la iniciativa.
AVANCES DE LA JUSTICIA CHILENA
El Parlamento chileno también está tramitando un proyecto para tipificar el delito de tortura. Una ley que declarará imprescriptibles los delitos de lesa humanidad y derogará los beneficios carcelarios a los condenados por causas relacionadas con derechos humanos.
En los últimos meses, la justicia chilena ha avanzado en causas relacionadas con crímenes de la dictadura. Varios militares fueron encarcelados por su relación con el «caso Quemados» (el brutal homicidio de un fotógrafo en 1986) y la Corte Suprema aprobó hace unas semanas procesar a los supuestos homicidas del diplomático español Carmelo Soria, secuestrado y asesinado en 1976. Más de cien ex miembros de las fuerzas armadas cumplen condena por su implicación en delitos de lesa humanidad.
Sin embargo, para la presidenta de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos, Lorena Pizarro, el gobierno centroizquierdista de Nueva Mayoría «no ha dado señales respecto de que se materialicen políticas que permitan terminar con la impunidad».
RECORDANDO TRAGEDIA VIVIDA POR LOS CHILENOS
El golpe de Estado en Chile del 11 de septiembre de 1973 fue una acción militar llevada a cabo por las Fuerzas Armadas de Chile conformadas por la Armada de Chile, la Fuerza Aérea de Chile y el Ejército de Chile en conjunto con Carabineros de Chile para derrocar al presidente socialista Salvador Allende Gossens y al gobierno izquierdista de la Unidad Popular.
Salvador Allende asumió en 1970 como Presidente de Chile, siendo el primer político de orientación marxista en Occidente que accedió al poder a través de elecciones generales en un Estado de Derecho. Su gobierno, de marcado carácter reformista, se caracterizó por una creciente polarización política en la sociedad y una dura crisis económica que desembocó en una fuerte convulsión social.
INFLUENCIA DE ESTADOS UNIDOS
La posibilidad de ejecutar un golpe de Estado contra el gobierno de Allende existió incluso antes de su elección. El gobierno de Estados Unidos, dirigido por el presidente Richard Nixon y su secretario de Estado Henry Kissinger, influyeron decisivamente en grupos opositores a Allende, financiando y apoyando activamente la realización de un golpe de Estado. Dentro de estas acciones se encuentran el asesinato del general René Schneider y el Tanquetazo, una sublevación militar el 29 de junio de 1973.
A mediados del año 1973, tras el Tanquetazo, grupos dentro de la Armada de Chile planean derrocar al gobierno, al que posteriormente se suman los altos mandos de la Fuerza Aérea y grupos dentro de Carabineros. Días antes de la fecha planificada para la acción militar, se sumó Augusto Pinochet, comandante en jefe del Ejército. En la mañana del 11 de septiembre, las cúpulas de las Fuerzas Armadas y de Orden lograron rápidamente controlar gran parte del país y exigieron la renuncia inmediata de Salvador Allende, quien se refugió en el Palacio de La Moneda. Tras el bombardeo de la sede presidencial, Allende se suicidó y la resistencia en el Palacio fue neutralizada.
El golpe de Estado marcó el fin del gobierno de la Unidad Popular, que sería seguida por el establecimiento de una junta militar liderada por Pinochet. Chile, que hasta ese entonces se mantenía como una de las democracias más estables en América Latina, entró en una dictadura cívico-militar que se extendió hasta 1990. Durante este período, fueron cometidas sistemáticas violaciones a los derechos humanos, se limitó la libertad de expresión, se suprimieron los partidos políticos y el Congreso Nacional fue disuelto.
