El diluvio: Los expertos, amenazas y cumplimiento


Rafael Cardona

La fecha del 30 de abril es importante para la historia del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes de la OEA (a través de la secretaría general de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos). Ese día concluyó el segundo periodo de su trabajo de cooperación técnica con el gobierno de México.

La cooperación técnica se convirtió en militancia política y la “coadyuvancia” construyó un cadalso al cual quisieron subir a Enrique Peña Nieto. Y virtualmente, a los ojos de muchos, lo consiguieron.

Antes de marcharse a regañadientes, como se verá en la segunda parte de esta columna escrita el día de su penúltima conferencia de prensa, los expertos del GIEI encendieron una hoguera para echar a Tomás Zerón  de Lucio, el Director de la Agencia de Investigación Criminal de la PGR.

El funcionario desmontó sus versiones y explicó amplia y documentadamente los hechos.

“Las evidencias, dijo, desmienten las especulaciones”. Nadie le hizo caso. Ahora piden su cabeza.

CARDONA FAMILIARES DE LOS 43....

PROTAGONISMO SUPERIOR

Elusiva, indefinida, oculta y a veces deliberadamente escondida, la verdad se sirve de muchas mentiras.

Ufanos por un protagonismo superior a la naturaleza de su circunstancia y condición, los coadyuvantes se convirtieron en jueces; los auxiliares en mandones, los mandones en dictadores y los césares en profesionales despechados,  pues concluido su segundo periodo de contrato nadie –con autoridad para decirlo.–, les pidió la prolongación de sus servicios sin los cuales la verdad, siempre elusiva, indefinida, oculta y a veces deliberadamente escondida, nunca podrá fulgir en todo su esplendor como ellos hubieran permitido si el gobierno, el pérfido y mendaz gobierno, no les hubiera puesto trabas en sus indagatorias.

–Pero antes de irnos, sabe usted, ahí le dejamos este regalito, y con toda la intención de reventar a la Procuraduría General de la República y ponerla por segunda vez contra la pared (la primera fue cuando fue destituido  Jesús Murillo Karam), anuncian un video en el cual se observa al director de la agencia contra el crimen de la PGR, Tomás Zerón de Lucio, en sospechosa actividad en las márgenes del río San Juan y los linderos del basural de Cocula, en la infame labor de sembrar evidencias, fabricar pruebas y bloquear el proceso de la justicia y repartir bolsas negras de plástico con falsedades adentro.

–Qué horror

No importa si para hacerlo hubiera sido tan ingenio como para invitar al “tour” de la perversidad a Pilar San Martín, representante de la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos y al mismísimo Omar Trejo, ahora secretario técnico de los expertos independientes y sabios quienes lo acusan desde el fondo de sus dolidos corazones, mientras en sus pechos se les marchitan los collares de flores puestos ahí en torno de su cuello por los dolidos padres de Ayotzinapa (es una sinécdoque) quienes les pedían a gritos lacrimosos, ¡no se vayan, no se vayan!

Zerón de Lucio tomó la acusación por los cuernos y reviró la tarde del miércoles con una extensa explicación del proceso según el cual la justicia fue obstruida y torcida delante de periodistas y con imágenes e instrucciones grabadas de por medio y funcionarios internacionales del sistema planetario de los Derechos Humanos.

“Todo a la luz del día” dijo Zerón , pero no obstante eso los compañeros de viaje salieron en defensa de la patraña de los “expertos” cuya despedida ya dura tanto como las de Lorenzo Garza.

–Me voy pero te quemo el mantel”, diría de ellos algún mexicano quien se sabe otras formas del rencor de una despedida involuntaria, pero no es ahora el caso, sino observar cómo el segundo paso ha sido dado: ya no sólo se dicen las cosas, sino una vez más se rechazan pruebas y explicaciones. Zerón miente por una sencilla razón: es un funcionario de un gobierno omiso, falso y violador de los Derechos Humanos.

CARDONA   Tomás Zerón  de Lucio

Así, en juicio sumario.

–Quítenlo, dicen desde la Cámara de Diputados los antiguos guerrilleros ahora redimidos, pero cuya “alma mater” (es otra sinécdoque) ha sido mancillada.

–Remuévanlo, dicen los paniaguados de la Organización de las Naciones Unidas y la OEA y el coro de las voces disidentes se alza monocorde pues así es como debe ser.

El caso de Iguala hace mucho tiempo dejó de ser una materia de investigación forense. Ahora es el escenario de una disputa política en la cual –por desgracia—se juega parte del futuro de México pues ese caso ya contaminó todo el proceso electoral del año 2018. Y el saldo para nada favorece al PRI. Para nada.

Alguien le pregunta en Televisa a Ángela Buitrago, una de las más visibles en el GIEI si cree posible llegar alguna vez al conocimiento de la verdad. Y ella niega tal horizonte (esta es una metonimia, no una sinmaras y el escenario, es ellos para el uso de las obviamente el mmienrto de la verdad. Y ella niega tal horizonte.

–No mientras no haya una voluntad distinta, lo cual significa en buen castellano, así como presumen hablarlo los colombianos; no mientras esté aquí este gobierno y en ese dictado final se monta, obviamente el más capacitado y hábil de todos ellos para el uso de las cámaras y el escenario, Carlos Beristain, quien dice con un tono aparentemente neutro y conmovido, a quien más le hace falta la verdad, es a México.

“Y si no llegamos a ella –sentencia como Casandra –, esta será una losa por muchos, muchos años del futuro de este país. Nosotros seguiremos atentos al caso, dentro o fuera”.

Y esa es la finalidad.

Alejandro Moreno Cárdenas

MANOSEO DE LOS HECHOS

Cobijados por el resplandor de su invulnerable condición de peritos infalibles y sin  embargo señalados en sus humanas fallas por una crítica alentada y patrocinada (según dicen de boca propia) por el gobierno cuyos afanes ellos critican y censuran con acrimonia, los expertos internacionales,  así modestamente autodenominados, rinden esta noche –al fin– su previsible informe de actividades. Un refrito en toda la extensión de la idea.

Agua de borrajas sobre las laderas del monte recién parido.

Peritos Forenses Argentinos

No se necesita ser Nostradamus para prever  sus dictámenes finales: el gobierno ha mentido en su investigación; la verdad histórica no existe, debimos actuar durante más tiempo, no pudimos por la intransigencia culpígena y la “verdad verdadera”, madre de todas las certezas, no la sabemos ni nos dejarán conocerla.

Pero en todo este manoseo de los hechos de Cocula e Iguala, solamente queda una certeza: la enorme discusión se ha volcado en el tino  o la falsedad del sitio donde fueron incinerados los estudiantes secuestrados por los narcotraficantes de los Guerreros Unidos. Ya ni siquiera se puede discutir, a estas alturas, si están vivos o muertos.

Los tres peritajes se han trenzado en especulaciones. Las únicas certezas indiscutibles vienen de Austria y confían la identidad de las cenizas y rastros orgánicos humanos, con ADN de dos de los masacrados. Eso sería suficiente para inferir con una buena dosis de lógica en el igual destino de los restantes. Pero los Forenses Argentinos (con toda su dosis de ideología militante) y los miembros del GIEI, lo niegan rotundamente.

Pero al parecer se trata de prolongar la duda como elemento central para probar no el secuestro y el homicidio múltiple sino la violación de los Derechos Humanos para lo cual es necesario demostrar la desaparición forzosa, imprescriptible hasta en tanto no aparezcan los abducidos (como dicen ahora) o se pruebe fehacientemente la ubicación de sus despojos.

Pero como los criminales son expertos en desaparecer restos humanos mediante la quema, la molienda, la desintegración en químicos (pozole, pues) o la disposición de cuerpos en cavernas, desfiladeros o pudrideros inaccesibles, mucho tiempo podría pasar sin  conocer lo ocurrido. Quizá no se llegue a saber jamás.

Pero si se le adjudica la responsabilidad al Estado, entonces se gana un blanco vulnerable. Si no fueron sus fuerzas quienes forzosamente desaparecieron a los mártires de Iguala, entonces es su responsabilidad decirnos quién  fue, cómo lo hizo y dónde están las pruebas. Si no lo hace –en el lenguaje de los derechos Humanos–, él es responsable de toda la cadena cuyo último eslabón es la impunidad.

Aurelio Nuño Mayer

El Estado siempre queda contra la pared. Y como no tiene más presencia visible sino el gobierno, entonces todo recae sobre él.

La insistencia de adjudicarle responsabilidad al Ejército (vulnerable ahora ante las inferencias cítricas generalizadoras por la aparición del célebre video de la disculpa), es un  ejemplo de cómo se busca por todos los medios el debilitamiento del Estado por un organismo supranacional.

Obviamente la descalificación inmediata a este tipo de argumentación es simple e instantánea: el nacionalismo trasnochado, la teoría de la conspiración, como si los intereses internacionales desaparecieran cuando quien los advierte los denuncia,  como le sucede ahora a la presidenta de Brasil, por ejemplo.

Todas estas tesis eslabonadas y toda esa argumentación  prolongada hasta el infinito, con el respaldo de la Organización de los Estados Americanos a través de la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos (templo de la corrección contemporánea), cumple con un propósito adicional: debilitar al Estado con la plataforma infalible, incontestable, inatacable de los Derechos Humanos, una de las modas de la sociedad globalizada en la cual los acuerdos económicos y políticos están sujetos a cláusulas democráticas siempre y cuando se admita y asuma la democracia como le conviene a los países más poderosos, los organismos financieros internacionales y la “espontaneidad” ciudadana cuya enjundia reemplaza en muchos casos a las instituciones públicas con el pretexto de la participación comunitaria.

jose-luis-cuevas

La Organización de los Estados Americanos ha sido usada a lo largo del tiempo para muchos fines. Por ejemplo, en el campo de las cultura promoviendo pintores antagónicos al nacionalismo muralista mexicano, mediante la promoción de artistas como Cuevas, Lamm y Syzlo.  El curador Gómez Sicre fue el responsable de llevar a cabo esa “guerra suave”.

“Demodé” o no, el bloqueo cubano sigue siendo un hecho, al menos en lo jurídico y las cláusulas democráticas, imposiciones bien vestidas y mejor peinadas, siguen siendo condicionantes para las nuevas relaciones económicas en el mundo dominado por la globalización, novedoso lenguaje para la asimilación y el dominio. No se necesita la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca.

Antes era la lucha contra el comunismo y su fantasma mundial. Hoy son los Derechos Humanos o la guerra contra el narcotráfico, pero los brazos del poder siempre se envuelven en franciscanos ropajes.

Pero con los visitantes “expertos” o sin ellos, esta batalla ya ha sido perdida por el gobierno mexicano, En este sexenio y en el próximo, excepto si el sucesor de Peña desata una verdadera y no improbable cacería de brujas.

Ángela Buitrago

AURELIO NUÑO Y ALEJANDRO MORENO, ENTREGAN MIL CERTIFICADOS EN CAMPECHE

Durante la entrega de mil certificados de nivel Primaria y Secundaria a igual número de adultos mayores de 15 años, el  secretario de Educación, Aurelio Nuño Mayer hizo un reconocimiento al gobernador Alejandro Moreno Cárdenas por tener un compromiso absoluto y fundamental con la educación de Campeche y de todo México, pues los resultados alcanzados colocan a la entidad en los primeros lugares en la implementación de la reforma educativa.

En un  evento reciente, con cinco mil personas de los 11 municipios de la entidad, el mandatario Alejandro Moreno, defendió la educación como  la solución para el desarrollo nacional, pues a más preparación académica menos delincuencia.

“Con la reforma educativa los mexicanos cuentan con un nuevo modelo de preparación y capacitación”, agregó al significar la importancia que tiene el Programa Especial de Certificación, pues ofrece a quienes concluyen sus estudios nuevas oportunidades para salir adelante y mejorar sus condiciones de vida.